Hacia el respeto de los derechos humanos de los transexuales en Chile
Andrés Rivera se llamó María Georgina más de cuarenta años y era oficialmente una mujer aunque se sentía hombre.
En el año 2007 sentó un precedente en Chile cuando logró que las autoridades de su país reconocieran oficialmente que era un hombre, sin tener que pasar previamente por una operación genital. Se convirtió en el primer hombre con vagina de ese país.
Para lograr que las autoridades respetaran su identidad, tuvo que someterse a una mastectomía y una histerectomía.