Durante su intervención en una sesión interactiva de la Asamblea General sobre la responsabilidad de los Estados de proteger a sus poblaciones de genocidios, limpieza étnica y crímenes de lesa humanidad, Ban Ki-moon recordó los acontecimientos en Iraq, Siria, Sudán del Sur, Ucrania, Gaza y el norte de Nigeria.

“Estas crisis ilustran el costo humano del fracaso: el fracaso al enfrentar el crecimiento de las ideas extremistas que propagan el odio y manipulan las diferencias entre comunidades para obtener beneficios políticos; el fracaso de los Estados de proteger a sus poblaciones; y el fracaso de la comunidad internacional de reaccionar a las señales de alerta temprana o de responder adecuadamente una vez que los crímenes atroces se producen”, dijo Ban.

El titular de la ONU sugirió un mejor desarrollo de las capacidades para abordar las causas de esos abusos y la ayuda de los Estados que quieran proteger a sus poblaciones.

Apuntó que esa asistencia debe realizarse con un enfoque fundamentado en un espíritu de asociación y de refuerzo de la soberanía de los Estados, en lugar de ponerla en tela de juicio.

El concepto de Responsabilidad de proteger fue adoptado en la Cumbre Mundial de 2005.