Al cumplirse casi dos años del inicio de su mandato, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos declaró este lunes que poner fin a la guerra en Gaza y evitar un conflicto regional en toda regla “es una prioridad absoluta y urgente”.

Durante su actualización anual ante el Consejo de Derechos Humanos, Volker Türk dijo que también debe abordarse “la situación más amplia de ilegalidad en todo el territorio palestino ocupado derivada de las políticas y prácticas de Israel”, tal y como expuso la Corte Internacional de Justicia (CIJ) en su opinión consultiva de julio.

El máximo responsable de los derechos fundamentales enfatizó que los Estados no deben aceptar “el flagrante desprecio del derecho internacional”, incluidas las decisiones vinculantes del Consejo de Seguridad y las órdenes de la Corte Internacional de Justicia.

Más de 40.000 palestinos han muerto a manos de las fuerzas israelíes desde el 7 de octubre y casi 1,9 millones de personas han sido desplazadas por la fuerza en toda la Franja.

Además, 101 rehenes israelíes siguen retenidos en Gaza y casi 10.000 palestinos están recluidos en prisiones israelíes, muchos de ellos de forma arbitraria.

En Cisjordania, operaciones mortíferas y destructivas, algunas a una escala no vista en las últimas dos décadas, están empeorando la situación allí, ya agudizada por la grave violencia de los colonos, señaló Türk.

Más de 600.000 alumnos de Gaza, sin regreso a clases

Mientras millones de niños vuelven este lunes a las aulas, más de 600.000 alumnos de Gaza comienzan su segundo curso sin clases, advirtió este lunes el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

Al menos 45.000 niños de seis años que deberían comenzar la primaria se ven privados de este derecho. La gran mayoría de ellos han sido desplazados de sus hogares y se enfrentan a una batalla diaria por la supervivencia.

El nuevo curso escolar tenía que haber comenzado hoy en todo el Estado de Palestina, pero no se ha reanudado en Gaza.

Desde octubre de 2023, todas las escuelas de la Franja están cerradas y, según UNICEF, un 84% están completamente destruidas o necesitarán importantes reparaciones. “Los niños de la Franja de Gaza han perdido sus hogares, sus familiares, sus amigos, su seguridad y su rutina”, declaró la directora regional de UNICEF para Oriente Medio y el Norte de África.

Adele Khodr indicó que también han perdido “el santuario y el estímulo que proporciona la escuela, con lo que su brillante futuro corre el riesgo de verse oscurecido por este terrible conflicto”.

En Cisjordania, los 782.000 estudiantes que hay allí también son víctimas de la violencia y las restricciones impuestas por Israel. Desde octubre de 2023, entre el 8% y el 20% de las escuelas de Cisjordania han estado cerradas y se han producido 69 ataques contra escuelas y 2354 incidentes que han afectado a centros de enseñanza, estudiantes y profesores, según el Ministerio de Educación palestino.

La agencia insistió en que, para los niños más pequeños, la ausencia de escolarización amenaza su desarrollo cognitivo, social y emocional. Los padres informan de importantes repercusiones psicosociales y en la salud mental de los niños, como sentimientos de mayor frustración y aislamiento.

Concluye la segunda fase de la campaña de vacunación

Por su parte, la Oficina de Coordinación para los Asuntos Humanitarios (OCHA) señaló en su última actualización que la segunda fase de la campaña de vacunación contra la polio de Gaza concluyó el pasado domingo 8 de septiembre, con 256.572 niños vacunados en Khan Younis y Rafah en cuatro días.

La tercera fase tendrá lugar en el norte de la Franja del 10 al 13 de septiembre.

Sin embargo, una nueva orden de evacuación israelí en el norte, la primera en más de dos semanas, incluye zonas en las que se habían acordado pausas locales para la vacunación.

El organismo advirtió, además, de que el número de misiones y movimientos humanitarios dentro de Gaza denegados por las autoridades israelíes se han duplicado en agosto en comparación con julio (105 frente a 53).

La mitad de las medicinas esenciales no están disponibles en Gaza, y se están agotando otros insumos vitales, como la insulina.