Iván Ciro Palomino ha expuesto en las Naciones Unidas su obra “Conciencia”. Durante su visita a la Organización, nos ha hablado de lo que esto significa para él.

Es una alegría inmensa estar en este lugar para poder difundir este mensaje. Realmente, las armas son monstruos.

Para el ilustrador, el arte es una forma de comunicarse y, en este caso, de denunciar una situación en la que viven millones de personas.

Como artistas, tenemos el poder de transmitir mensajes y, dentro de esos mensajes, las ilustraciones que yo realizo hablan sobre las consecuencias que provoca una guerra.

En su caso, fue la obra de una fotógrafa la que le hizo darse cuenta de la realidad que se vive en muchos lugares del mundo.

Ella trata de tomarle una foto a una niña, de cinco o seis años, y su primera reacción es la de levantar los brazos, en señal de rendición.

El autor de “Conciencia” utiliza las armas, pero solo para desenmascarar su potencial destructor.

Cada ilustración tiene un personaje dentro. Por ejemplo, hay un rifle que está solo, pero si tú lo ves bien ahí está escondido un lobo con boca abierta.

Iván compara el poder de estos elementos destructivos con el del arte, que permite concienciar al público.

Yo creo que hay mensajes, tanto en la ilustración como en pinturas, que pueden ser poderosos, tanto como las armas son explosivas, fuertes y destructivas. 

Sus ilustraciones están disponibles en internet y, tras la exposición, serán donadas para que todo el mundo tenga acceso.

Mis gráficas las voy a donar para que se haga su uso libre, tanto de producción impresa a lo que ellos deciden usar.

La intención de Iván es que su mensaje llegue al público y poder así contribuir a acabar con este fenómeno que atemoriza a tantas personas en el planeta.