Consejo de Seguridad condena tráfico de migrantes y trata de personas frente a las costas de Libia

Un barco de refugiados y migrantes en el Mediterráneo en 2014. Foto: ACNUR//Alfredo D’Amato
Un barco de refugiados y migrantes en el Mediterráneo en 2014. Foto: ACNUR//Alfredo D’Amato

Consejo de Seguridad condena tráfico de migrantes y trata de personas frente a las costas de Libia

El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas condenó este jueves el tráfico de migrantes y trata de personas frente a las costas de Libia en el mar Mediterráneo, e instó a los Estados Miembros a actuar para apoyar al Gobierno de Acuerdo Nacional de ese país.

En una resolución redactada por el Reino Unido y adoptada unánimemente, el Consejo recordó a los Estados Miembros que el tráfico de migrantes y la trata de personas son desafíos comunes al tratarse de delitos causados por organizaciones delictivas transnacionales. Por ello, se deben combatir “con un espíritu de solidaridad internacional y responsabilidad compartida”.

El órgano de la ONU instó a los países miembros y organizaciones regionales, incluida la Unión Europea, a cooperar con el Gobierno de Pacto Nacional de Libia para intercambiar información sobre actos delictivos cometidos en el área, y a proporcionar asistencia a los migrantes y víctimas de la trata rescatados en el mar.

En particular, el Consejo instó a que se vigile con buques de guerra y aeronaves, posibles actos de tráfico y de trata, llevando a cabo inspecciones de embarcaciones sospechosas siempre y cuando haya consentimiento del Estado del pabellón.

La resolución 2380 busca desarticular los grupos delictivos organizados que se dedican al tráfico de migrantes y la trata de personas, y evitar la pérdida de vidas. “No tiene como fin de socavar los derechos de las personas e impedirles que soliciten protección en virtud del derecho internacional de los derechos humanos y el derecho internacional de los refugiados”, indica el texto.

Todos los migrantes, incluidos los solicitantes de asilo, deben ser tratados con humanidad, y dignidad y sus derechos deben respetarse plenamente, recalcó el Consejo de acuerdo con el derecho internacional.

El 27 de agosto, Ghassan Salamé, el representante especial de la ONU para Libia, alertó al Consejo de Seguridad sobre el riesgo que supone desatender los problemas de Libia para los países vecinos, la región y el mundo en general. Afirmó que la migración irregular y los ingresos que ésta genera para las redes de traficantes también amenazan la estabilidad del país, mientras que cientos de miles de migrantes y refugiados están atrapados en Libia, a menudo sufriendo abusos o detención en condiciones inhumanas.