ONU pide investigación de bombardeo de hospital en Kunduz, Afganistán
En un comunicado, Ban Ki-moon recordó que los hospitales y el personal de salud son protegidos explícitamente por el derecho humanitario internacional y solicitó una investigación profunda e imparcial de los hechos.
El titular de la ONU encomió el valor y la dedicación del personal de Médicos Sin Fronteras y transmitió sus condolencias a los familiares de los fallecidos.
Por su parte, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra'ad Al Hussein, describió el ataque como algo trágico e inexcusable y subrayó que las fuerzas gubernamentales afganas y los actores internacionales tienen la obligación de respetar y proteger a los civiles.
El ataque, lanzado por la aviación estadounidense, según las autoridades afganas, causó la muerte de doce trabajadores de Médicos sin Fronteras que prestaban sus servicios en el hospital y de siete pacientes, además de causar 37 heridos de gravedad.