ACNUR abre un nuevo campamento para refugiados en Kurdistán
Desde que esa y otras agencias de la ONU incrementaron la pasada semana sus planes de ayuda humanitaria se han suministrado más de 10.000 tiendas de campaña y más de cien mil colchones a la población desplazada a causa de la violencia.
También en Dahuk, el Programa de la ONU para el Desarrollo (PNUD) firmó este jueves un acuerdo con las autoridades locales para abrir pozos, que permitirán aliviar las carencias de agua que tienen numeroso desplazados.
Esa provincia alberga a más de 400.000 refugiados iraquíes y también sirios, lo que está poniendo al límite los recursos de las comunidades locales.
El Programa Mundial de Alimentos de la ONU (PMA) también sigue distribuyendo ayuda entre los desplazados iraquíes y desde la escalada de las hostilidades en junio pasado ha aportado alimentos a más de 700.000 personas.
El PMA alertó hoy de que es muy urgente proveer asistencia a grupos de población que permanecen en áreas sitiadas por grupos armados, sobre todo en las provincias de Anbar y Salah-al-Din.