Alertan sobre la discriminación que sufren los niños de padres condenados a la pena de muerte o ejecutados
Los niños cuyos padres han sido sentenciados a la pena de muerte o ejecutados sufren discriminación y exclusión social, recordó hoy la Alta Comisionada Adjunta de la ONU para los Derechos Humanos.
Flavia Pansieri señaló que la ejecución de un progenitor puede provocar la vulneración de las garantías fundamentales de un menor, conforme a lo establecido por la legislación internacional.
Los países que aplican la pena de muerte deben respetar la Convención sobre los Derechos del Niño, subrayó.
“También tienen la responsabilidad de considerar las consecuencias que sufren las familias de aquellas personas que han sido condenadas a la pena de muerte o ejecutadas”, dijo Pansieri.
En ese sentido, subrayó la urgencia de analizar el impacto social, económico y psicológico que tiene la condena a la pena capital o la ejecución sobre los hijos menores de edad.
Recordó que la Oficina de la Alta Comisionada de los Derechos Humanos es partidaria de la abolición de la pena capital o, en última instancia, de la moratoria de las ejecuciones.