Estados Unidos condena violación como arma de guerra
Rice, cuyo país preside el órgano durante este mes, convocó una sesión especial para discutir la situación de las mujeres en los conflictos armados y el uso de la violación como arma de guerra.
Subrayó que la violencia sexual no sólo es una cuestión de seguridad sino que afecta el desarrollo económico y la estabilidad social de los países.
“Una de las formas más importantes de medir el valor de nuestra comunidad internacional es determinar qué tan efectivos somos en proteger y proveer justicia a los más vulnerables de nuestros miembros. Cuando las mujeres y las niñas son perseguidas y violadas, la comunidad internacional no puede permanecer callada o inactiva”, declaró Rice.
La secretaria de Estado mencionó también las acusaciones de delitos sexuales planteadas el año pasado contra miembros de las fuerzas de mantenimiento de la paz de la ONU en varias misiones y por personal de la Organización en Liberia.
“La noticia alentadora es que se han tomado medidas para encarar este problema. Uno de los perpetradores está cumpliendo una sentencia en su país y varios casos siguen bajo investigación. Esta situación debe servir como modelo para todos los países que contribuyen tropas a las operaciones de paz”, dijo Rice.
Añadió que si bien el perpetrador individual es el responsable de sus abusos, los países miembros son responsables de aplicar los procedimientos disciplinarios.