ACNUR respalda nuevas medidas para rescatar a migrantes que corran peligro en el mar
Las nuevas medidas, aprobadas por los Estados Parte, enmiendan dos convenciones internacionales: la de seguridad en el mar de 1974, y la de búsqueda en el mar de 1979, y obligarán a los Estados a permitir a las personas rescatadas en el mar a desembarcar, lo que librará a los barcos de la responsabilidad de asistirlas tras el rescate y garantizará que se les escuche.
“Muchas veces, los barcos que han cumplido con su deber humanitario han tenido problemas porque los Estados no han dejado desembarcar a algunos migrantes y refugiados rescatados, sobre todo cuando no tienen los documentos requeridos”, explicó Ron Redmond, portavoz en Ginebra del ACNUR.
Agregó que este impedimento coloca a los propietarios de los buques y a las compañías navieras en una situación muy difícil que podría llegar a amenazar la integridad de la tradición humanitaria de asistir a quienes corran peligro en el mar.
El ACNUR y la Organización Marítima Internacional (OMI) pronto publicarán un folleto con las provisiones legales relevantes para los dueños de los barcos, los capitanes y su personal, las autoridades de los países, las compañías aseguradoras y otras partes implicadas en los rescates.
Cada año, un número indeterminado de personas se ahoga en el Mediterráneo, el Mar Rojo, el Golfo de Adén, el Caribe y otros mares del mundo cuando las precarias embarcaciones que los transportan naufragan.