OIT destaca consecuencias del estrés en los trabajadores y las empresas

OIT destaca consecuencias del estrés en los trabajadores y las empresas

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) destacó hoy las consecuencias del estrés tanto en la salud de los trabajadores como en los costos de las empresas.

En una conferencia sobre el tema, expertos estudiosos del fenómeno en Europa recurrieron a ejemplos concretos para mostrar en términos cuantitativos los efectos del estrés en el mundo laboral.

Si 95% del personal de una empresa de 7.000 empleados goza de buena salud, esto significa que 350 trabajadores no asistirán cada día. El costo anual promedio de esa ausencia sería de 22.5 millones de euros. Si esa proporción aumenta sólo en 1%, produciría 4.5 millones de euros de beneficios económicos al año, dijo Bernd Tenckhoff, profesora en la Universidad de Ciencias Aplicadas de Bochum.

La académica sostuvo que estas cifras son sólo la punta del iceberg. “La falta de motivación, la depresión y otras formas de mala salud mental afectan la productividad de los empleados mucho antes de la enfermedad real”, señaló.

“La salud mental es el talón de Aquiles de la economía basada en el conocimiento”, comentó Gerd Albracht, coordinador para el Desarrollo de Sistemas de Inspección del Trabajo de la OIT.

Agregó que se estima que para el año 2020 la depresión será la segunda causa más frecuente de invalidez en el mundo desarrollado. “La falta de salud mental representa una pérdida de 4% del Producto Interno Bruto (PIB) de la Unión Europea (UE), principalmente por la disminución de la productividad”, indicó Albracht.

El estrés relacionado con el trabajo representa uno de los mayores problemas de salud laboral en la Unión Europea. La mitad de los 150 millones de empleados de Europa se siente expuesta a una presión considerable en el trabajo. Esto significa un daño para las empresas y la economía: la Unión Europea estima para la región el costo del estrés en el lugar de trabajo es de aproximadamente 20.000 millones de euros anuales.

En este sentido, la OIT subrayó que los programas de bienestar laboral garantizan un importante ahorro y mejoran la productividad. “Las actividades conjuntas entre empleadores y trabajadores y una política empresarial de salud son inversiones en el futuro de una empresa. Garantizan la competitividad a largo plazo a través del establecimiento y el mantenimiento de la salud humana”, afirmó la Organización.