En Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura, ONU llama a erradicar esta práctica

En Día Internacional en Apoyo de las Víctimas de la Tortura, ONU llama a erradicar esta práctica

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“El Día Internacional de las Naciones Unidas en Apoyo de las Víctimas de la Tortura brinda una oportunidad de reafirmar nuestro compromiso de erradicar la tortura y los tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, independientemente del modo en que se produzcan o se manifiesten”, dice el mensaje del Secretario General de la ONU, Kofi Annan, para esta jornada, a celebrarse el domingo 26 de junio.

Con este motivo, Annan pugna por hacer una pausa y recordar a las víctimas de la tortura que no han sobrevivido, “escuchar las historias de las que sí lo han hecho y apoyar sus esfuerzos por lograr que se haga justicia a las víctimas y a sus familias”.

La tortura es una de las formas más graves de violación de los derechos humanos, e impone un costo terrible a millones de personas y sus familias. La violación, los golpes en las plantas de los pies, la asfixia por inmersión, las quemaduras, la aplicación de corriente eléctrica, la privación del sueño, las sacudidas y las palizas son métodos habituales de los torturadores para quebrantar la personalidad del individuo.

Si bien los daños físicos son enormes, las secuelas psicológicas y emocionales suelen ser aún más destructivas y difíciles de curar. Muchos supervivientes de la tortura sufren de pesadillas y de recuerdos angustiosos recurrentes, rehuyen a la familia, la escuela y el trabajo y experimentan pérdida de confianza.

Louise Arbour, Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, ha señalado que no hay ninguna circunstancia en que se permita la tortura. “Ni siquiera en situaciones de emergencia, ni en situaciones de guerra. Los instrumentos internacionales de derechos humanos así lo estipulan”, puntualizó.

No obstante, la Alta Comisaría reporta una frecuencia creciente de estas prácticas en todas las regiones del mundo. “No se puede enfatizar lo suficiente la importancia de prevenirla”, señaló Arbour en un comunicado que recuerda a los Estados su obligación de investigar y castigar todos los actos de tortura y trato inhumano o degradante.