Panel independiente considera disfuncional el sistema de seguridad de la ONU en Iraq

Panel independiente considera disfuncional el sistema de seguridad de la ONU en Iraq

Annan y Ahtisaari
El actual sistema de seguridad de la ONU es disfuncional y da pocas garantías a su personal en Iraq y en otros entornos de alto riesgo, por lo que debe ser reformado, concluyó el Panel Independiente encargado de investigar el tema después del ataque del 19 de agosto a la oficina de las Naciones Unidas en Bagdad.

Martti Ahtisaari, ex mandatario de Finlandia y presidente del Panel nombrado el 22 de agosto por el Secretario General de la ONU, Kofi Annan, presentó hoy el informe, elaborado tras entrevistar a un número importante de personal de seguridad en las instalaciones de la Organización en Nueva York, Amman, Bagdad y Ginebra.

Además, los expertos del Panel conversaron con representantes de las Fuerzas de Coalición, de la Autoridad Provisional y de organizaciones no gubernamentales (ONG) que operan en Iraq; y visitaron el lugar del ataque recopilando información de las investigaciones que llevan a cabo la policía iraquí y la Autoridad Provisional.

Para proteger al personal de la ONU en zonas de crisis en la actual coyuntura, los dispositivos de seguridad deben contar con el más alto nivel de profesionalismo y experiencia, apuntó el documento. Y “el actual sistema no es capaz de proveer esta experiencia”, continuó.

“El nuevo sistema debe tener una cadena clara de orden, un circuito auditivo, un manejo capaz y amplio de la información y una división clara de las tareas y la coordinación del trabajo”, puntualizó.

Asimismo, destacó la necesidad de que el sistema cuente con los recursos adecuados para poder actuar de manera efectiva y puntual.

En el caso el atentado en Bagdad, el Panel consideró que si bien un sistema apropiado podría no haber evitado el ataque, sí podría haber minimizado la vulnerabilidad de los trabajadores y las instalaciones, reduciendo, consecuentemente, el número de víctimas.

La implementación de las normas de seguridad y los dispositivos fueron torpes y no cumplían con las reglas comunes, agregó.

Una de las mayores deficiencias detectadas por el Panel fue la falta de responsabilidad para la toma de decisiones y posturas por parte de los administradores de la ONU con respecto a la seguridad del personal.

En este sentido, añadió, hace falta una nueva cultura de responsabilidad tanto entre los encargados de la seguridad como entre los trabajadores de las misiones de la Organización, que deben cumplir con las reglas y los dispositivos.

En Iraq no hay zonas sin riesgo, al contrario, existe un entorno de alto riesgo, por lo que el tema de la seguridad debe contemplarse desde un nuevo punto de vista y la ONU debe plantearse como objetivo lograr un equilibrio entre las metas operativas de la Organización y la protección de sus trabajadores nacionales e internacionales, subrayó el informe.

Por último, enfatizó que los principios de seguridad deben aplicarse a todas las misiones de la ONU.