La trata de personas en América Latina se caracterizaba en el pasado por ser de origen de las víctimas de ese delito que eran llevadas de la región al exterior para el comercio de seres humanos con fines de explotación sexual, laboral, de mendicidad u otras formas de esclavitud moderna.

Sin embargo, en los últimos años, varios países de la región se han convertido en ruta de las redes de tratantes, además de que los afectados son también comerciados al interior de sus países.

Esta es una de las tendencias discutidas durante un reciente congreso sobre el tema, celebrado en Bogotá, Colombia y organizado por la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) en ese país.

El Congreso contó con la participación de más de 450 expertos y representantes de organizaciones que trabajan en el tema con el objetivo de analizar respuestas eficientes al problema.

Una de las participantes fue Jessica Belares del Centro de Capacitación y Servicio para la Mujer, en Bolivia. Se refirió a los avances legales contra el flagelo en la región.

Duración: 4'25"

Producción: Rocío Franco

Entrevistas: Centro de Información de la ONU en Bogotá