“La ONU está lista para apoyar a Iraq y a la región coordinando los esfuerzos políticos, sociales y humanitarios necesarios para afrontar la crisis actual”, manifestó Mladenov, que también es el responsable de la Misión de la ONU en ese país.

En un debate abierto del Consejo dedicado a la situación en Iraq, que presidio el secretario de Estado estadounidense John Kerry y en el que participaron diversos ministros de Exteriores, el representante de la ONU señaló que todos los iraquíes perderán si no cooperan contra la amenaza terrorista y agregó, que cualquier estrategia de seguridad no tendrá éxito si no cuenta con el aprobado de todos.

Mladenov saludó la decisión del Consejo de Ministros iraquí de iniciar un proceso para elaborar una ley para crear la Guardia Nacional, lo que consideró contribuirá a fortalecer la seguridad.

Aludió también al sufrimiento que el grupo extremista Estado Islámico ha llevado a la población en Iraq y Siria y señaló que sólo podrá hacerse frente a esa amenaza si Iraq, la región y la comunidad internacional trabajan juntos sobre la base de la Carta de las Naciones Unidas y relevantes resoluciones del Consejo de Seguridad.

El representante de la ONU mencionó también la grave situación humanitaria en ese país, donde se calcula que unos 1,8 millones de personas han tenido que abandonar sus hogares en lo que va de año. De ellos, unos 850.00 se han refugiado en Kurdistán

Señaló que las agencias de la ONU y otras asociadas afrontan numerosos obstáculos para asistir a unas 650.000 personas que aun residen en zonas donde se combate y cuya situación puede agravarse con la llegada del invierno.

En una declaración presidencial aprobada durante la sesión de este viernes, el Consejo de Seguridad de la ONU instó a la comunidad internacional a reforzar y ampliar el apoyo al gobierno de Iraq en su lucha contra el grupo armado extremista Estado Islámico y otros asociados, respetando el derecho internacional.

En esa declaración de la presidencia de ese órgano, que este mes corresponde a Estados Unidos, se señala que “sólo es posible derrotar al terrorismo con un planteamiento sostenido y amplio que entrañe la participación y la colaboración activa de todos los Estados y organizaciones internacionales y regionales para frenar, debilitar, aislar y neutralizar la amenaza terrorista”.

El Consejo también reiteró la urgente necesidad de poner fin al comercio directo o indirecto de petróleo procedente de Iraq en el que esté involucrado ese grupo, con el objetivo de acabar con la financiación del terrorismo.

Ese órgano acogió con beneplácito la formación del nuevo gobierno iraquí y pidió que la comunidad internacional lo apoye. También recalcó la necesidad de que todos los sectores de la población iraquí participen en el proceso político y en el diálogo político.

El Consejo condenó de forma enérgica los ataques de organizaciones terroristas, entre ellas el Estado Islámico de Iraq y el Levante,(ISIL) también conocido como Estado Islámico y otros grupos asociados en Iraq, Siria y Libano, y pone de relieve que esta ofensiva a gran escala constituye una gran amenaza para la región.