Washington y Moscú lanzaron la iniciativa de una conferencia de paz con la participación del gobierno de Al-Bashar y de la oposición con el fin de llegar a un acuerdo que ponga fin a la guerra civil.

Ban Ki-moon subrayó la importancia de que la oposición asistiera a la reunión como un grupo unido y destacó que la delegación del gobierno sirio debe ser alentada a participar.

“El pueblo sirio anhela la paz y la esperanza. Sin embargo, lo único que ven es muerte y más muerte. Todo lo que oyen son conversaciones sobre conversaciones y la gente sigue muriendo y las familias continúan huyendo. Los enfrentamientos continúan expandiéndose y pronto podrían abarcar a toda la región. Esperamos que las delegaciones, en particular la de los grupos opositores envían sus representaciones de manera unida y coherente”, dijo Ban.

Agregó que también espera que la delegación del gobierno sirio pueda participar plenamente de las negociaciones junto al enviado especial de la ONU, Lakhdar Brahimi.

En cuanto a la participación de Irán y Arabia Saudita en la conferencia, Ban señaló que no hay un acuerdo sobre si sus voces necesitan ser escuchadas y de qué manera.