En un comunicado, Ben Emmerson sostuvo que el discurso sienta nuevas bases en varios aspectos de esa lucha.

“Por primera vez expresa el compromiso de este gobierno de buscar un fin a su conflicto armado con Al Qaeda lo más pronto posible; le recuerda al mundo que no todas las amenazas o ataques terroristas pueden equipararse con una situación de conflicto armado continuo; y aclara con más autoridad que nunca las justificaciones legales de los asesinatos selectivos y las limitaciones bajo las que se llevan a cabo”, apuntó el experto.

Emmerson destacó asimismo que el discurso marcó las medidas que el presidente está decidido a tomar para cerrar la prisión de Guantánamo.

El relator afirmó que la publicación de los principios de las políticas para el uso de la fuerza en las operaciones contraterroristas es un paso significativo hacia una mayor transparencia y responsabilidad.

“También desecha mitos, incluido el que sugiere que Estados Unidos tiene derecho a mirar a todos los hombres jóvenes como combatientes y, por lo tanto, como objetivos legítimos”, puntualizó Emmerson.