En su primera conferencia de prensa en Juba como titular de la Misión de las Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS), Hilde Johnson afirmó que la nueva legislación para esos sectores demuestra el compromiso del gobierno con el establecimiento de un Estado democrático.

Agregó que a seis meses de su independencia, el país avanza con determinación hacia la consolidación de su soberanía; sin embargo, subrayó la urgencia de poner fin inmediatamente al ciclo de violencia en el estado de Jonglei.

La enviada advirtió que los acontecimientos en Jonglei ponen en riesgo la vida de miles de personas además de amenazar la estabilidad de toda el área.

“La UNMISS condena enérgicamente la violencia por parte de las comunidades y urge a los líderes políticos, tradicionales y jóvenes a esforzarse al máximo para acabar con los asesinatos y los enfrentamientos, que ya han causado muchas víctimas”, apuntó Johnson.

Asimismo, expresó preocupación por las declaraciones y mensajes de odio de algunos individuos y grupos que incitan a la violencia étnica, y llamó a las autoridades a juzgar a los responsables de esa violación a las leyes nacionales e internacionales.

Por otra parte, Johnson informó que, de acuerdo con su mandato de protección a los civiles, la UNMISS ha desplazado sus fuerzas a las zonas de mayor peligro para la población.