Al cumplirse dos años de su secuestro, la ONU señaló a las FARC que son enteramente responsables del bienestar físico de Jara y que deben dar a la familia pruebas de que está vivo.

En una nota emitida en Nueva York, Naciones Unidas recordó que Jara fue secuestrado de un vehículo de la ONU convenientemente identificado.

La ONU pidió no sólo la liberación de Jara sino de todas las personas secuestradas por las FARC y por otros grupos armados. Se trata de una grave violación de los derechos humanos y del derecho internacional que está infligiendo un sufrimiento terrible al pueblo colombiano, concluyó la nota.