Guatemala se recupera de los desastres medioambientales sin que el mundo industrializado responda con soluciones

El Presidente Alejandro Giammattei Falla de Guatemala interviene en el debate general del septuagésimo séptimo período de sesiones de la Asamblea General.
ONU/Cia Pak
El Presidente Alejandro Giammattei Falla de Guatemala interviene en el debate general del septuagésimo séptimo período de sesiones de la Asamblea General.

Guatemala se recupera de los desastres medioambientales sin que el mundo industrializado responda con soluciones

Cambio climático y medioambiente

La nación centroamericana es una de las veinte que alberga más del 70% de la diversidad biológica del planeta y que se enfrenta constantemente a amenazas que hacen peligrar su patrimonio natural y el de la humanidad. Para el año 2032 prevé superar el 80% de producción energética mediante fuentes renovables.

Tras la creación de las Naciones Unidas todos pensamos que la paz y los logros por las conquistas sociales serían permanentes, pero, con el transcurso de los años, “hemos despertado de ese sueño” y actualmente nos encontramos en un mundo dividido y contaminado, por lo que hoy deberíamos reunirnos para buscar soluciones, discutir, debatir y dar un paso al frente: “es ahora o nunca”, afirmó este martes el presidente de Guatemala en su intervención en el debate de alto nivel de la Asamblea General.

“Con la misma voluntad que asumimos los retos que nos presentó la pandemia del COVID-19 hace ya más de dos años, con ese mismo ímpetu, hemos trabajado para sobreponernos de sus efectos y de las consecuencias de otros eventos mundiales que han evidenciado cuan interdependientes somos los seres humanos”, señaló Alejandro Giammattei.

El mandatario guatemalteco denunció que la falta de acceso equitativo al mercado mundial de las vacunas contra el coronavirus, que impidió salvar las vidas de decenas de miles personas, y que el COVID-19 “nos demostró que hay situaciones y amenazas que no reconocen fronteras ni categorías, que todos los estados del mundo somos vulnerables y que no estamos preparados para enfrentarlo global, pero sobre todo solidariamente”.

Una situación de la que se puede salir adelante mediante la unión y encontrando un balance entre la salud de las personas y de la economía y procurando el bien común, cuando el producto interno bruto del país llegó a crecer un 8% durante el año pasado.

A continuación, resaltó los estragos causados por el cambio climático en América Central al afirmar que se siguen recuperando de los desastres provocados durante este año y los anteriores “sin que el mundo industrializado, que es el auténtico responsable de esta catástrofe, responda con soluciones a los que ellos han ocasionado”.

Recordó que su país es una de las veinte naciones que alberga más del 70% de la diversidad biológica del planeta y que se enfrenta constantemente a amenazas que hacen peligrar el patrimonio natural de Guatemala y de la humanidad.

En cuanto a avances medioambientales anunció que para el año 2032 prevé que se supere el 80% de producción energética mediante fuentes renovables.

Sin embargo, anunció una crisis de inseguridad alimentaria y nutricional que deja “más hambruna ante la indolencia de los países que tienen más frente a los que tienen poco o nada”.

El tráfico ilícito de migrantes es un tema de seguridad nacional

Entre las principales causas del fenómeno migratorio enumeró los factores económicos y los relacionados con el cambio climático y que su Gobierno trabajó en soluciones estructurales que, con vistas al futuro, es lo único que podrá permitir la detención de la migración irregular.

“Para ello, hemos impulsado un paquete de leyes que estimula la inversión con la certeza jurídica necesaria que permite la generación de empleo para la atención de las necesidades básicas de la población, así como una ley que impulsa la vivienda de interés social”, detalló.

Igualmente destacó que el tráfico ilícito de migrantes se ha convertido en un tema tanto de seguridad nacional como transnacional y que se han detenido a “flujos masivos irregulares de migrantes” que procedían de naciones “regionales y extra regionales”.

En este sentido mencionó la aprobación de la ley contra el tráfico ilícito de migrantes y llamó a los gobiernos regionales a trabajar juntos contando “con un enfoque homologado de la migración irregular y de la legislación necesaria”.

En clave internacional, Giammattei se sumó “al clamor mundial por el cese de la guerra en Ucrania y a las amenazas contra la soberanía de Taiwan e Israel”.