Crecimiento espectacular del número de inventos ligados a la inteligencia artificial

El robot de la NASA Robonaut 2 en la feria de la ciencia y la ingeniería de Estados Unidos en 2014.
NASA / Aubrey Gemignani
El robot de la NASA Robonaut 2 en la feria de la ciencia y la ingeniería de Estados Unidos en 2014.

Crecimiento espectacular del número de inventos ligados a la inteligencia artificial

Asuntos económicos

El formidable aumento de solicitudes de patentes en el campo de la inteligencia artificial registrado en los últimos cinco años promete revolucionar todas las industrias y nuestra vida cotidiana, según se desprende de un nuevo informe lanzado este jueves por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual.

Según las cifras que baraja la OMPI, desde 2013 se han publicado más de 170.000 patentes relacionadas con la inteligencia artificial y, además, se ha producido un auge de publicaciones científicas sobre el tema.

El director de la Organización, Francis Gurry, definió la inteligencia artificial como una disciplina científica que busca replicar a la inteligencia humana a través de máquinas en áreas tan variadas como el transporte, las telecomunicaciones y la atención sanitaria.

Gurry, explicó a los medios de comunicación reunidos en Ginebra que los inicios de la inteligencia artificial se remontan a la década de los años 50 del siglo pasado pero que en los últimos cinco años se ha producido un “salto cuantitativo” en un campo que se mueve a una velocidad de vértigo y con el que están lidiando actualmente.

La tecnología es algo neutral y depende de cómo se utilice.

Cuestionado acerca de si la inteligencia artificial es beneficiosa o perjudicial para la humanidad, Gurry manifestó “que la tecnología es algo neutral y depende de cómo se utilice. Si se usa para desarrollar sistemas de armas autónomos que nos van a matar a todos, no son muy buenas noticias. Pero si se aplica para mejorar los indicadores de salud para el diagnóstico, u otros fines, es una gran noticia".

Técnicas y aplicaciones de la inteligencia artificial

La técnica más extendida relacionada con la inteligencia artificial, incluida en más de un tercio de las patentes registradas, es el aprendizaje automático, en particular las redes neuronales artificiales que han servido para revolucionar las traducciones automáticas. 

El aprendizaje profundo, una técnica de adiestramiento automático que ha dado un vuelco a la inteligencia artificial y que se usa en los sistemas de reconocimiento de voz, entre otras aplicaciones, fue la práctica que obtuvo un crecimiento más rápido de patentes al conseguir un aumento promedio anual del 175% entre 2013 y 2016.

La capacidad de visión computarizada, que incluye el reconocimiento de imágenes y es básica para la puesta en marcha de los vehículos autónomos, es la aplicación de inteligencia artificial más popular, mencionada en el 49% de todas las patentes.

Las solicitudes de patentes para métodos de control, que gestionan el comportamiento de dispositivos como los brazos robóticos, aumentaron de 193 en 2013 a 698 en 2016.

Empresas privadas vs. sector público

El dominio del sector privado sobre el público en este campo es evidente: de los 30 principales solicitantes de patentes, 26 son empresas privadas y solo 4 son universidades u organismos públicos de investigación.

En cambio, si nos referimos a la distribución empresarial por países vemos un destacado liderazgo estadounidense a nivel mundial.

IBM ostenta el mayor número de solicitudes de patentes de Inteligencia artificial, que sumaron 8290 invenciones, seguida por Microsoft con 5930.

A continuación se encuentra la firma japonesa Toshiba (5223), el grupo coreano Samsung (5102) y el grupo nipón NEC (4406).

Otro actor destacado, especialmente en el ámbito académico, es China. Así, 17 de las 20 mejores universidades y organizaciones públicas de investigación que publican información científica sobre inteligencia artificial están ubicadas en el país asiático.

Buscadores, apoyo estatal y dificultades

Gurry también destacó el significativo crecimiento que tendrá la inteligencia artificial tanto en el sector económico como en el ámbito militar y resaltó la importancia de que los Estados miembros debatan “sobre cuestiones jurídicas y éticas relacionadas con los derechos de propiedad intelectual que plantea la tecnología”.

"Es de esperarse que el enfoque estratégico de los principales actores geopolíticos se centre en su posicionamiento con respecto a la inteligencia artificial", dijo.

El informe subraya el papel preponderante que han tenido los principales buscadores de Internet como Google o Baido (en china) en la revolución de la inteligencia artificial, ya que han aprovechado el potencial de la tecnología desde el inicio, como lo habían hecho desde antes los mayores fabricantes de ordenadores, Microsoft y Apple.

La OMPI también destacó que es fundamental un apoyo estatal a la innovación que incluya medidas de financiación para el fomento de la creatividad y el establecimiento de un marco regulatorio enfocado a protegerla mediante el registro de patentes.

El estudio destaca la dificultad que tienen otros países, incluso aquellos que sobresalen en formación, para competir con el talento empresarial, de ingeniería e inversión de Estados Unidos y China, y añade que las mayores oportunidades sin explotar se encuentran en industrias como la agricultura, la sanidad y la fabricación.

Inteligencia Artificial por sectores

  • El sector del transporte, incluidos los vehículos autónomos, es uno de los sectores con la tasa de crecimiento de patentes más rápida al aumentar un 134%  entre 2013 y 2016.

  • La inteligencia artificial es esencial para mejorar las redes en el campo de las telecomunicaciones. Las solicitudes de patentes aumentaron un 84% entre 2013 y 2016.

  • En el rubro sanitario, la inteligencia artificial puede aplicarse a la cirugía robótica y la personalización de los tratamientos, cuyas patentes tuvieron una tasa media anual de crecimiento del 12% entre 2013 y 2016.

  • Las solicitudes de patentes por dispositivos personales, informática e interacción entre el hombre y la computadora creció un 36% entre 2013 y 2016.