António Guterres llegó este lunes a Addis Ababa para asistir a la segunda conferencia anual de las Naciones Unidas y la Unión Africana (UA), que copresidió con Moussa Faki Mahamat, líder de esta última.

Durante el encuentro, el Secretario General reiteró su compromiso de reforzar la asociación ONU-UA, basada en los principios de solidaridad y respeto mutuo, de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas.

Guterres dijo que no podían permitirse el lujo de fracasar en África por lo que las Organizaciones se encuentran trabajando juntas en el desarrollo sostenible del continente.

Ambos titulares revisaron una serie de situaciones regionales en las que ambas organizaciones participan en los esfuerzos de mantenimiento o mediación de la paz.

Tanto Guterres como Mahamat participaron en una reunión especial del Consejo de Paz y Seguridad de la Unión Africana.

“La Unión Africana es el socio más cercano de las Naciones Unidas. Estoy animado por las importantes medidas tomadas para fortalecer aún más la asociación estratégica entre las dos organizaciones”, dijo el Secretario General.

Más tarde ante la prensa, Guterres recalcó el éxito de la reciente visita del Primer Ministro de Etiopía a Eritrea, y los avances de Sudán del Sur hacia la paz, acontecimientos que dan esperanzas de que el continente africano está en la dirección correcta.

“Creo que la evolución reciente en relación con Eritrea y Etiopía es una señal de esperanza muy importante, no solo para los dos países, no solo para África, sino para todo el mundo. Cuando vemos tantos conflictos y tantos años en los que estos dos países no han podido reunirse, es una muy buena noticia que la voluntad política de los dos países para resolver sus problemas sea ahora evidente. La ONU está lista para hacer lo que las dos partes nos pidan que hagamos”, expresó el titular de la ONU.

El Secretario General recordó que a pesar de los avances aún persisten situaciones muy dramáticas en el continente.

“Tenemos cuatro operaciones de mantenimiento de la paz: Malí, República Democrática del Congo, Sudán del Sur y en República Centroafricana, donde no se dan las condiciones de los mandatos tradicionales de  del mantenimiento de la paz, donde existen todo tipo de grupos armados y terroristas, y donde los cascos azules son asesinados”, dijo.

Guterres aseguró que la ONU está comprometida con una reforma profunda de las operaciones de mantenimiento de la paz en estrecha coordinación con la Unión Africana, pero también reconoce que mantener la paz no es suficiente, sino que se necesita aplicarla y luchar contra el terrorismo, y que las “organizaciones de la Unión Africana estén particularmente capacitadas para hacerlo”.

Antes de partir de Addis a Nueva York, el Secretario General celebró una cena de trabajo con el Primer Ministro de Etiopía, Abiy Ahmed.