Entre los más afectados pueden estar los niños, ya que un 40% ya sufría malnutrición antes de la tragedia y sólo un 33% de los nacidos tienen certificado de nacimiento, lo que puede dificultar las tareas de reunificación. El Fondo Central de Respuesta a Emergencias de la ONU ha destinado ya 15 millones de dólares para impulsar las tareas de ayuda.