Mujeres indígenas celebran la ceremonia de apertura antes del inicio del Foro de Igualdad Generacional en Ciudad de México

Guterres piensa en grande para los próximos 25 años de la ONU… y del planeta

ONU Mujeres/Paola Garcia
Mujeres indígenas celebran la ceremonia de apertura antes del inicio del Foro de Igualdad Generacional en Ciudad de México

Guterres piensa en grande para los próximos 25 años de la ONU… y del planeta

ONU y Secretario General

El Secretario General de la ONU insta a acelerar la recuperación de la COVID-19 y lograr un mundo en el que todas las personas puedan prosperar en paz, con dignidad e igualdad en un planeta sano. Aboga tamibén por impulsar un plan mundial de vacunación para superar la pandemia. En un informe, examina los próximos 25 años y refleja su visión del sobre el futuro de la cooperación mundial y la revitalización del multilateralismo. 

Cuando la ONU celebró el año pasado su 75º aniversario, cerca de 1,5 millones de personas participaron durante un año en una iniciativa de la Organización que sirvió para escuchar las prioridades de la gente y sus expectativas sobre cómo la cooperación internacional puede influir en el futuro.

Los participantes compartieron sus esperanzas y temores y pidieron una ONU más transparente e inclusiva. Además, identificaron el cambio climático y los problemas medioambientales como el principal reto mundial a largo plazo.

La iniciativa Nuestra Agenda Común se basa en las conclusiones de esa participación masiva, así como en las aportaciones de líderes de opinión, grupos eminentes como The Elders, diplomáticos y otros socios, que ofrecieron sus sugerencias, soluciones e ideas para que la ONU pase a la acción durante los próximos 25 años.

Durante la conmemoración del 75º aniversario de la Organización, los Estados miembros pidieron al Secretario General que les presentara un informe con recomendaciones para impulsar esta Agenda Común y responder a los retos actuales y futuros.

El informe de António Guterres pide reafirmar los valores fundamentales de la ONU, al tiempo que reconoce que se han de remodelar los cimientos de la Organización para que reflejen mejor el mundo actual.

“La pandemia [de la COVID-19] ha demostrado nuestra incapacidad colectiva para unirnos y tomar decisiones conjuntas en aras del bien común, incluso ante una emergencia mundial inmediata y potencialmente mortal”, recordó Guterres al presentar su informe ante la Asamblea General.

Desafío inmediato: producir más vacunas

Aseveró que el desafío conjunto inmediato es la respuesta a la pandemia de COVID-19 y consideró que aún hay una oportunidad de actuar juntos, "en solidaridad y por nuestro propio beneficio para ponerle fin antes de que cause aún más daño".

Para ello confió en que durante el próximo Debate General se adopten medidas sobre un plan mundial de vacunación, implementado por un grupo de trabajo de emergencia formado por países que producen o pueden producir vacunas, la Organización Mundial de la Salud, los socios de ACT-Accelerator e instituciones financieras internacionales.

"Este grupo debería trabajar con las empresas farmacéuticas para al menos duplicar la producción de vacunas y garantizar que éstas lleguen al 70% de la población mundial en la primera mitad de 2022", puntualizó.

El titular de la ONU destacó que las organizaciones multilaterales no estuvieron a la altura de los actuales retos mundiales y que su actuación fue “demasiado débil y fragmentada” dejándonos a merced “de un futuro de grave inestabilidad y caos climático”.

“El año pasado, en la Declaración de los Dirigentes con motivo del 75º aniversario de las Naciones Unidas, me encargaron ustedes que formulara recomendaciones para hacer avanzar Nuestra Agenda Común con el fin de abordar estos retos para la gobernanza mundial. Hoy, tras un profundo proceso de consulta y reflexión, presento mi respuesta”, explicó.

El Secretario General delineó en su informe cuatro áreas principales de acción.

Manifestación contra la violencia de género en Ecuador.
ONU Mujeres/Johis Alarcón
Manifestación contra la violencia de género en Ecuador.

1-Un nuevo contrato social con los derechos humanos como eje fundamental

Lograr una renovación del contrato social, basada en los derechos humanos, que sirva para reconstruir la confianza y la cohesión social.

Para lograrlo, Guterres propone atajar la actual epidemia de desinformación y crear una nueva estructura conjunta sobre integridad financiera que afronte la evasión fiscal, el blanqueo de dinero y los flujos financieros ilícitos.

Al mismo tiempo, aboga por revisar nuestro pensamiento en torno a los derechos humanos, incluyendo nuestras actividades en línea, y conseguir una cobertura de protección social universal que incluya la asistencia sanitaria universal junto a la eliminación de la violencia contra las mujeres y las niñas garantizando su participación plena e igualitaria.

Estudiantes en una escuela de la ciudad de Hanoi, en Vietnam.
ONU/Mark Garten
Estudiantes en una escuela de la ciudad de Hanoi, en Vietnam.

2-El futuro empieza hoy y está ligado a los jóvenes

Centrarse en el futuro, con base en una mayor solidaridad con los jóvenes y las generaciones futuras, mediante la adopción de medidas transformadoras en materia de educación, formación profesional y aprendizaje continuo, incluida una Cumbre para la Transformación de la Educación en 2022.

A esta iniciativa, Guterres añade la creación de un Laboratorio de Ideas Futuras y la designación de un enviado especial para las Generaciones Futuras que sirva de portavoz de los 10.900 millones de personas que se espera que nazcan este siglo; así como mejorar la Oficina de la Juventud de la ONU.

Los arrecifes de coral en las islas Fiji están amenazados por el calentamiento y el aumento de acidez de los océanos.
Coral Reef Image Bank/Jayne Jenk
Los arrecifes de coral en las islas Fiji están amenazados por el calentamiento y el aumento de acidez de los océanos.

3-Salvar los recursos naturales y los bienes públicos por medio del multilateralismo

Actuar urgentemente para proteger y garantizar los recursos globales compartidos -la alta mar, la atmósfera, la Antártida y el espacio exterior- y los bienes públicos mundiales- la paz, la seguridad económica y la salud mundial-.

Para conseguirlo, Guterres indicó que necesitamos un multilateralismo “más interconectado, inclusivo y eficaz”.

Sus principales recomendaciones en este apartado incluyen la creación inmediata de un plan de vacunación global para la COVID-19, y una mejor integración del sistema financiero global con otros procesos de toma de decisiones mediante una Cumbre Bienal entre el G20, el ECOSOC, el Secretario General y los jefes de las instituciones financieras internacionales.

Asimismo, pidió la creación de una Plataforma de Emergencia ante Crisis de gran magnitud, y sugirió una Cumbre sobre el Futuro para alcanzar un nuevo consenso sobre las preocupaciones globales más importantes que el sistema internacional debe proteger y cumplir, como la paz o la acción climática más allá de 2030.

Imagen de la sede de la ONU en Nueva York
ONU/Manuel Elias
Imagen de la sede de la ONU en Nueva York

4-Una nueva ONU, para una nueva época

El último punto mira al futuro de la Organización. En él, Guterres apuesta por unas Naciones Unidas modernizadas y preparadas para una nueva era. Es decir, una ONU orientada a los retos del siglo XXI que pueda ofrecer en todo su sistema soluciones más relevantes, multilaterales y con múltiples partes interesadas.

Esta transformación se basará en el análisis de datos, la innovación, la visión estratégica, el análisis predictivo y las ciencias del comportamiento.

Para alcanzar este objetivo, el Secretario General cuenta con un fortalecimiento de la ONU como fuente por excelencia de datos y evidencias, y con la profundización del diálogo con los gobiernos locales y regionales, la sociedad civil, los parlamentos y el sector privado.