La crisis del coronavirus no puede afectar de por vida a los niños más vulnerables

El titular de la ONU continúa su imparable campaña contra el COVID-19 en todos los ámbitos posibles. Si hace unos días denunciaba el aumento de la violencia doméstica contra las mujeres, las campañas de desinformación o solicitaba la unión de los líderes religiosos y una tregua universal de todos los conflictos, hoy pidió a los Gobiernos que tomen las medidas para proteger a los niños más vulnerables de los efectos de la pandemia.
La crisis causada por la pandemia del coronavirus y sus condiciones de confinamiento afecta a todos los niños, pero no todos lo sufren en iguales condiciones.
El Secretario General de la ONU recordó este jueves que la lucha contra el COVID-19 es mucho más complicada para los menores que viven en barrios marginales, en campamentos de refugiados, o los que están en zonas de conflicto. También para los niños con discapacidades o los que están recluidos en instituciones y centros de detención.
Durante el lanzamiento de un informe con orientaciones acerca del impacto del COVID-19 sobre los niños, António Guterres afirma que "los efectos nocivos de esta pandemia no se distribuirán de manera equitativa, sino que se prevé que serán más perjudiciales para los niños de los países más pobres y de los barrios más pobres, así como para los que ya están en situación de desventaja o vulnerabilidad".
Según el estudio, esta situación de crisis afecta a los menores principalmente a través de tres vías: la infección causada por el propio virus, los inmediatos impactos socioeconómicos que causan las medidas para detener la transmisión del virus y los potenciales efectos a largo plazo en la demora de la aplicación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Organización.
Esta triple amenaza a la que apunta el informe de Guterres se prevé que afectará a los niños de varios modos:
El informe del Secretario General considera que la pandemia es potencialmente catastrófica para muchos niños alrededor del planeta y que "sus repercusiones corren el riesgo de desbaratar los progresos mundiales en varios de los Objetivos de Desarrollo Sostenible en favor de los niños".
Evitar este desenlace, dependerá de los avances en tres frentes: