Venezuela, separación forzada... Las noticias del viernes
Derechos humanos
La Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas denuncia que la impunidad continúa en Venezuela en violaciones de los derechos humanos. Varios expertos de la ONU piden a Estados Unidos que libere a los niños detenidos y deje de utilizarlos para disuadir la inmigración.
La impunidad continúa en Venezuela
La Oficina ha publicado un informe que indica que las autoridades venezolanas no han responsabilizado a los autores de graves violaciones de los derechos humanos, entre las que se incluyen homicidios, el uso excesivo de la fuerza en contra de manifestantes, detenciones arbitrarias, malos tratos y tortura.
El documento se centra en las conocidas “Operaciones de Liberación del Pueblo (OLP)” que, de julio de 2015 a marzo de 2017, provocaron la muerte de 505 personas a manos de las fuerzas de seguridad.
El documento también deja al descubierto el grave impacto de la crisis económica y social que atraviesa el país en lo que se refiere a los derechos a la alimentación y la salud.
La Oficina elaboró el informe de manera remota, sin haber visitado el país.
Utilizar a los niños para disuadir la inmigración
En las semanas anteriores, cerca de 2000 niños se vieron forzados a separarse de sus familias en la delimitación entre Estados Unidos y México. Dada la presión nacional e internacional que esta medida generó, el presidente Donald Trump firmó este miércoles una orden para revocar dicha política.
Sin embargo, la decisión del presidente no aborda la grave situación a la que se enfrentan los migrantes detenidos, como lo advirtió un grupo de especialistas de las Naciones Unidas.
"La detención de niños es punitiva, obstaculiza gravemente su desarrollo y en algunos casos puede equivaler a tortura. Los niños están siendo utilizados como un elemento disuasorio para la migración irregular, lo cual es inaceptable", dijeron los expertos.
Además, indicaron que la falta de un registro adecuado hace que el seguimiento y la reunificación final de estos niños resulten difíciles y se teme que algunos niños nunca se reúnan con sus padres, ya que son enviados a diferentes partes de Estados Unidos, mientras que sus padres pueden haber sido deportados.
Se augura “una guerra comercial global”
El 1 de junio, la administración de Estados Unidos impuso aranceles del 25 % sobre el acero y del 10 % sobre el aluminio. Los gravámenes afectarán no solo a China, sino también a Canadá, México y los países de la Unión Europea.
Según la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, la UNCTAD, las recientes decisiones auguraran una guerra comercial. En esta situación, las empresas perderán ganancias y los trabajadores se quedarán sin empleo. Los gobiernos perderán ingresos y los consumidores tendrán menos productos disponibles. Y, sin importar dónde se encuentren, todos ellos incurrirán en costos más elevados.
Además, los cambios pueden tener serias implicaciones para otras áreas, como los esfuerzos para combatir el cambio climático y garantizar la paz y la prosperidad.
La Conferencia señala que la única manera de prevenir esta situación es “evitarla todos juntos”.
“Europa ya no está en el centro de una crisis migratoria”
Hace tres años comenzó la crisis mediterránea de migración, cuando más de un millón de personas desesperadas cruzaron el mar hacia Europa. Pero el continente ya no constituye el centro de la migración. De hecho, las cifras de llegadas en el Mediterráneo están en niveles anteriores a 2014 y continúan cayendo hacia sus promedios históricos.
A pesar de esto, muchos países siguen conmocionados y, desde entonces, se observa una tendencia restrictiva y unilateral en las políticas que aplican muchos países europeos a la hora de tratar con los migrantes y los refugiados.
Con motivo de las reuniones que la Unión Europea celebrará en Bruselas, Filippo Grandi, del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, anunció que ha llegado el momento de cambiar la situación.
“Hoy exhorto a los Estados europeos a aprovechar esta oportunidad para encontrar un enfoque nuevo y unido que responda a las necesidades compartidas de todos los países para poder gestionar sus fronteras y sus políticas migratorias, de manera que defiendan simultáneamente los estándares de asilo europeos e internacionales”.
Pequeñas donaciones, grandes impactos
Abandonada por su padre al nacer, Agnes, del sudoeste de Tanzania, vivió por 15 años fuera de su comunidad debido a su aspecto. Al haber nacido con un labio leporino, su padre no soportaba la idea de criar a una niña que no se veía ‘normal’. Su madre trató de conseguirle tratamiento, pero nadie pudo decirle adónde ir y finalmente se dio por vencida.
En 2009, a los catorce años, Agnes buscó trabajo en Dar es Salaam. Fue allí donde consiguió la dirección de un hospital para personas con discapacidad que podía brindarle apoyo. Poco después, Agnes pudo someterse a una cirugía para corregir su labio leporino.Abandonada por su padre al nacer, Agnes, del sudoeste de Tanzania, vivió por 15 años fuera de su comunidad debido a su aspecto. Al haber nacido con un labio leporino, su padre no soportaba la idea de criar a una niña que no se veía ‘normal’. Su madre trató de conseguirle tratamiento, pero nadie pudo decirle adónde ir y finalmente se dio por vencida.
La transformación fue asombrosa.