La ONU condena agresión de la Policía colombiana a misión humanitaria
En un comunicado emitido este martes, la Misión de la ONU en Colombia explicó lo sucedido en la vereda Tandil el domingo pasado donde sus funcionarios fueron víctimas de hostigamiento con tiros al aire y granadas, mientras intentaban ingresar a la zona en la que seis campesinos fueron asesinados el 5 de octubre en circunstancias que aún no se esclarecen.
La ONU aseguró que la misión humanitaria realizó todas las comunicaciones pertinentes para dirigirse al lugar y que incluso se encontraba acompañada de dos representantes de la Gobernación de Nariño, líderes comunitarios e indígenas cuando ocurrió el incidente.
“En medio del recorrido la delegación fue atacada por miembros del ESMAD y Policía Antinarcóticos con una bomba de aturdimiento a las 14:20 horas. Al respecto, los integrantes de la Misión gritaron para identificarse, mientras hacían esto, otra bomba de aturdimiento les fue lanzada a las 14:22 horas. En ese momento la delegación retrocedió, cuando cayeron otras dos bombas de aturdimiento, a las 14:23 y 14:24 respectivamente y una de ellas estuvo a punto de impactar sobre algunas personas, durante este tiempo también fueron escuchados disparos y además fue utilizado algún tipo de gas”, expresa el comunicado.
Agrega que en ningún momento la Misión dejó de comunicarse con los mandos de la Fuerza pública en el lugar para explicar los propósitos de su visita y coordinar el acceso y que ninguno de los miembros del grupo ejerció algún tipo de acción que justificara una respuesta violenta.
La Misión rechazó la agresión de la que fueron víctimas todas las organizaciones e instituciones presentes y aseguró que confía en que el gobierno tomará todas las medidas necesarias para que incidentes como este no se vuelvan a producir.