ONU expresa extrema preocupación por la evacuación de la ciudad siria de Daraya

A principios de junio de este año, el Programa Mundial de Alimentos logró entregar ayuda a la población de la ciudad sitiada de Daraya, en Siria, por primera vez desde 2012. Foto PMA/Hussam AlSaleh.
A principios de junio de este año, el Programa Mundial de Alimentos logró entregar ayuda a la población de la ciudad sitiada de Daraya, en Siria, por primera vez desde 2012. Foto PMA/Hussam AlSaleh.

ONU expresa extrema preocupación por la evacuación de la ciudad siria de Daraya

El coordinador para Asuntos Humanitarios de la ONU se dijo hoy profundamente preocupado por la evacuación de todos los habitantes de la ciudad sitiada de Daraya, en Siria, tras el acuerdo alcanzado entre las autoridades locales y el Gobierno de ese país.

Stephen O’Brien subrayó en un comunicado que esa medida viola las leyes internacionales y que la ONU ni forma parte de dicho acuerdo ni fue informada de la evacuación hasta pocas horas antes de que se produjera los pasados 26 y 27 de agosto.

“Naciones Unidas trabaja en el terreno a petición tanto del Gobierno sirio como de los ciudadanos de Daraya para ofrecer protección y ayuda humanitaria a todos los afectados por la evacuación. Sin embargo, los acuerdos que den lugar a evacuaciones masivas de civiles en ciudades que hayan estado bajo sitio durante un periodo de tiempo prolongado no son conformes al derecho internacional humanitario ni a las leyes de derechos humanos”, reiteró O’Brien.

Añadió que la medida no debe sentar precedente para otras ciudades sitiadas en Siria y que los desplazados deben tener la posibilidad de regresar a sus hogares de forma voluntaria, en condiciones de seguridad y dignidad, tan pronto como la situación lo permita.

“Seamos claros. Sitiar una ciudad es una táctica medieval. Todos los sitios deben ser levantados, pero no mediante un acuerdo que resulte en desplazamientos forzosos de civiles”.

La población de Daraya ha vivido bajo sitio durante los últimos cuatro años, lo que ha provocado que miles de niños sufran hambre y que la gente recurra a comer pasto para sobrevivir, además de fuertes restricciones a la libertad de movimiento, así como a la entrada de bienes y ayuda humanitaria. La ciudad ha sido escenario de combates, incluso de bombardeos aéreos, con consecuencias dramáticas.

El coordinador humanitario expresó también una gran preocupación por el deterioro de la situación en otras áreas sitiadas de Siria, entre ellas el barrio de Al Waer, en la ciudad de Homs, donde la población se encuentra desprotegida y tiene un acceso limitado a la ayuda básica necesaria para sobrevivir.

“A pesar de las informaciones que dan cuenta de un cese de los enfrentamientos, los aproximadamente 75.000 habitantes de Al Waer han sido objeto de ataques aéreos indiscriminados en la última semana, dejando numerosos muertos y heridos entre la población civil, incluido niños, además de casas y centros de primeros auxilios destruidos, así como crecientes restricciones en la libertad de movimiento”.

Stephen O’Brien reiteró su llamamiento a las partes enfrentadas en el conflicto sirio para que levanten de inmediato el sitio en Madaya, Deir-Ez-Zor, Douma, Foah y Kefraya, entre otras localidades; pongan fin a los ataques indiscriminados contra la población; y tomen todas las medidas necesarias para garantizar la protección de los civiles, tal y como lo estipulan el derecho internacional humanitario y los tratados sobre derechos humanos.