En el 30º aniversario del accidente de Chernobyl, la ONU destaca la importancia de la seguridad nuclear

Planta nuclear de Chornobyl. Foto de archivo:
Petr Pavlicek/OIEA
Planta nuclear de Chornobyl. Foto de archivo:

En el 30º aniversario del accidente de Chernobyl, la ONU destaca la importancia de la seguridad nuclear

Al conmemorar los 30 años del accidente de la planta nuclear de Chernobyl, la ONU llamó a reforzar las medidas de seguridad de esas instalaciones y materiales en todo el mundo.

Ocurrido en 1986, el de Chernobyl ha sido el desastre más grave en su tipo: cientos de miles de personas quedaron expuestas a altos niveles de radiación y unas 350.000 se vieron forzadas a abandonar sus hogares en zonas contaminadas.

La explosión de uno de los reactores expulsó grandes cantidades de material radioactivo sobre partes de Belarús, Rusia y Ucrania.

El Secretario General de la ONU afirmó que la efeméride ofrece una oportunidad para hacer un balance de la experiencia adquirida, reflexionar sobre el proceso de recuperación, y apreciar los esfuerzos heroicos de los trabajadores que se precipitaron a ayudar a los demás sacrificando su salud, y en muchos casos sus vidas.

En su mensaje para la ocasión, Ban Ki-moon también señaló que la tragedia de Chernobyl siempre estará vinculada a la seguridad nuclear, ya que el accidente dio lugar a una nueva conciencia sobre esas cuestiones y a mejoras en la regulación de las centrales nucleares en todo el mundo.

Por su parte, el director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Yukiya Amano, recordó que la mayor parte del territorio contaminado ha retornado a la actividad económica, en parte debido a la extensa asistencia de esa agencia de la ONU a las regiones afectadas por el desastre.

También señaló que lo ocurrido generó un avance en materia de cooperación global sobre seguridad nuclear, así como en la adopción de instrumentos legales internacionales sobre el tema.

No obstante, Amano señaló que a pesar de los avances, el mundo confrontó otro grave accidente en la planta nuclear de Fukushima Daiichi en Japón en 2011, un doloroso recordatorio de que esos incidentes pueden suceder en cualquier parte aún con la tecnología más avanzada.

En este sentido, insistió en que las medidas de seguridad nunca pueden darse por sentadas, y si bien el tema es responsabilidad de los Estados, la cooperación internacional desempeña un importante papel porque esos accidentes pueden rebasar las fronteras.