La preparación para desastres es una prioridad para la ciudad de Panamá

Imagen de la ciudad de Panamá. Foto de archivo: Radio ONU/Rocío Franco
Imagen de la ciudad de Panamá. Foto de archivo: Radio ONU/Rocío Franco

La preparación para desastres es una prioridad para la ciudad de Panamá

La ciudad de Panamá, una urbe de 1,7 millones de habitantes y una de las más pujantes de América Latina, ha vivido en los últimos 25 años cambios considerables.

Gran crecimiento demográfico, extensión de la urbanización y un aumento de población afectada por desastres naturales, son algunos de ellos.

Para hacer frente a esos retos, el gobierno municipal ha elaborado un plan de acción que incluye entre sus prioridades la gestión del riesgo de desastres.

Así lo comentó el alcalde, José Blandón, que acaba de suscribir a la urbe en la Campaña Mundial de Ciudades Resilientes, una iniciativa de la Oficina de Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres (UNISDR).

“La ciudad acaba de estrenar un plan de acción donde la resiliencia es una de las cinco prioridades para nosotros y poder incorporarnos a este programa con Naciones Unidas donde podemos tener este intercambio de experiencias de conocer modelos exitosos en ciudades de América Latina, con realidades muy parecidas a la de nosotros, nos ayuda muchísimo en el trabajo que tenemos que realizar, con los enormes retos que esto representa. Es una ciudad que está creciendo a un ritmo acelerado, lamentablemente con poca planificación en el pasado y que ahora asumimos. Al mismo tiempo que asumimos el reto de planificar el crecimiento futuro de la ciudad tenemos que garantizar que ese crecimiento vaya de la mano con lograr una ciudad más resiliente”, dijo en entrevista con Radio ONU.

Blandón comentó que algunos de los cambios introducidos por su administración para cumplir con ese objetivo han sido la creación de una dirección de gestión ambiental que tiene a su cargo abordar el cambio climático y la resiliencia.

Además, señaló que se han elaborado estudios para evaluar los factores de riesgo.

“De acuerdo al diagnóstico que pudimos hacer recientemente con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo, el riesgo principal es el de las inundaciones, posteriormente vientos fuertes y deslizamientos, son los tres riesgos principales. El tema de las inundaciones pues el crecimiento tanto por vía de asentamientos informales como de grandes proyectos inmobiliarios que están afectando las cuencas de los ríos principales de la ciudad, sobre todo el río Juan Díaz, es uno de los retos principales que tenemos. Ordenar ese crecimiento, ver cómo manejamos el tema de los asentamientos informales, cómo logramos reubicarlos de áreas de peligro a áreas donde puedan vivir en condiciones dignas”, apuntó Blandón.

Según el nuevo Plan de la alcaldía, la cantidad de personas damnificadas por desastres naturales aumentó de más de 5.000 en el año 2001, a picos de hasta 70.000 en 2008 y 2009.

Esos fenómenos afectan el desarrollo sostenible de la ciudad.

En su discurso del jueves pasado durante la suscripción de la Campaña de Mundial de Ciudades Resilientes, el alcalde de la ciudad de Panamá explicó la importancia de que las estrategias para hacer frente a este problema incluyan a otros sectores de la sociedad.

“La principal enseñanza que hemos sacado en casi dos años de gestión: enfrentar el reto de la resiliencia, alcanzar la meta de la sostenibilidad para la ciudad no es un trabajo exclusivamente del gobierno local. Es un trabajo en conjunto con distintos actores tanto del gobierno central como del sector privado, la sociedad civil, los medios de comunicación, la academia. Todos juntos tenemos que trabajar y aportar para lograr una ciudad más resiliente. Por supuesto, también la cooperación internacional y la posibilidad de intercambio de experiencias entre ciudades de América Latina con realidades parecidas creo que es algo fundamental para el logro del objetivo que nos hemos trazado”, añadió.

La definición de resiliencia se entiende como la forma en que las personas y las comunidades expuestas a adversidades son capaces de prevenir y reducir el impacto de esos fenómenos. También tiene en cuenta la capacidad de recuperación sin que las pérdidas causadas por el desastre comprometan sus planes de desarrollo a largo plazo.

La Campaña Mundial de Ciudades Resilientes de UNISDR busca ayudar a los gobiernos locales en ese campo, para lo cual propone diez estrategias esenciales.

Hasta el momento se han sumado a la Campaña más de 3.000 metrópolis en unos 119 países que abarcan a una población de más de 700 millones de personas.