El Secretario General de la ONU y el presidente del Banco Mundial prometen “no dejar a nadie atrás” en el Líbano

De visita oficial en el Líbano, el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, y el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, recalcaron su compromiso con el país, pidiendo fondos adicionales para un campo de refugiados, inaugurando un nuevo centro de desarrollo social y anunciando un plan de financiación para las escuelas del país.

En una conferencia de prensa conjunta en Beirut, Ban y Jim dijeron que el apoyo a los refugiados será la prioridad de la Cumbre Mundial Humanitaria que se celebrará en mayo en Estambul.

El Secretario General de la ONU insistió en que lo importante es que todo el mundo trabaje unido para asegurarse que nadie “se quede atrás” en el Líbano, el país que, con un millón de refugiados, es el que ha acogido al mayor número de sirios que huyen de la guerra.

“El Líbano necesita que cerremos la brecha entre la asistencia humanitaria a corto plazo y medidas a más largo plazo, incluyendo programas de educación y empleo”, dijo Ban.

Por su parte, el presidente del Banco Mundial anunció una iniciativa de 100 millones de dólares para respaldar el plan del gobierno del Líbano para mejorar la calidad de su educación y conseguir que todos los niños refugiados vayan a la escuela para fines del año 2016-2017.

Los fondos parecen provenir de la decisión “sumamente insólita” de la Junta Directiva del Banco de ofrecerle al Líbano unas condiciones de financiación normalmente reservadas sólo para países de ingresos muy bajos.

“No nos quedaremos mirando cuando existe el peligro de una generación perdida de niños sirios así como la pérdida de todo lo que el Líbano ha logrado en el campo de la educación”, dijo Kim. “Estamos aquí hoy para expresar nuestra solidaridad y apoyo al Líbano mientras encara el impacto de la crisis siria”.