Boko Haram impide que un millón de niños vayan a la escuela en Nigeria

Las niñas utilizan sus nuevos materiales escolares en un aula de un centro de aprendizaje informal respaldado por UNICEF en el campamento de Dalori para desplazados. Foto: UNICEF/Andrew Esiebo
Las niñas utilizan sus nuevos materiales escolares en un aula de un centro de aprendizaje informal respaldado por UNICEF en el campamento de Dalori para desplazados. Foto: UNICEF/Andrew Esiebo

Boko Haram impide que un millón de niños vayan a la escuela en Nigeria

La violencia y los ataques del grupo islamista Boko Haram contra la población civil en el nordeste de Nigeria y países vecinos impiden que un millón de niños puedan ir a la escuela. “Este conflicto supone un grave atentado contra la educación en la región”, denunció este martes UNICEF en un comunicado.

En Nigeria, Camerún, Chad y Níger, más de 2.000 colegios permanecen cerrados, algunos desde hace más de un año. Cientos han sido atacados, saqueados e incendiados, señaló UNICEF.

El Fondo de Naciones Unidas para la Infancia también informó que en los cuatro países ya son 11 millones de niños los que están sin escolarizar desde que se desató la crisis.

En Nigeria, aproximadamente 600 maestros han sido asesinados desde el comienzo de la insurgencia de Boko Haram, nombre que significa “la educación occidental es un pecado” en hausa, el idioma más hablado en el norte de Nigeria.

“El desafío que afrontamos es mantener a los niños seguros sin interrumpir su escolarización”, dijo Manuel Fontaine, director regional de UNICEF en África Occidental y Central. “Las escuelas han sido blanco de ataques, así que los niños tienen miedo de ir a clase. Pero cuanto más tiempo se ausentan, mayor es el riesgo de que sean maltratados, secuestrados o reclutados por grupos armados”, explicó.

Hasta el momento, UNICEF ha recibido 44 por ciento de los fondos necesarios este año para responder a las necesidades humanitarias de los niños en Níger, Nigeria, Camerún y Chad.

Para 2016, la agencia calcula que necesitará casi 23 millones de dólares para brindar acceso a la educación a los niños afectados por los conflictos en estos cuatro países.

Los atentados de Boko Haram y la respuesta de las fuerzas de seguridad han causado 17.000 muertos y 2,6 millones de desplazados desde 2009.