Consejo de DD.HH. de la ONU alerta sobre riesgo de “guerra civil” en Burundi
Al menos 400 personas han muerto como consecuencia de la violencia política que se desató en el país africano en abril. Y unos 220.000 burundeses han huido y buscado refugio en países vecinos.
En Ginebra, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos instó a la comunidad internacional a tomar medidas robustas e inmediatas para evitar una crisis aún mayor.
“Burundi está al borde del precipicio, a punto de que estalle una guerra civil. El momento para las respuestas parciales y no comprometerse se ha terminado. La situación en Burundi exige una respuesta robusta y decisiva por parte de la comunidad internacional”, dijo Zeid Ra'ad Al Hussein.
El Consejo aprobó unánimemente, sin votación, una resolución en la que 47 miembros piden al Alto Comisionado que organice y despliegue con urgencia una misión especial de expertos independientes que pueda llevar a cabo una investigación de las presuntas violaciones de derechos humanos, con el fin de evitar el deterioro de la situación.
Un representante de dicha misión, presentaría un informe oral ante el Consejo de Derechos Humanos en marzo de 2016.
Adama Dieng, representante especial de la ONU para la prevención del genocidio, advirtió que el país “parece estar al borde de un aumento de la violencia que podría desembocar en crímenes atroces”.