El conflicto en Sudán del Sur dispara el número de desplazamientos

La intensa lucha en los estados de Unity y el Alto Nilo en Sudán del Sur en los últimos dos meses ha desplazado a más de 100.000 personas y ha bloqueado las entregas de ayuda humanitaria a unas 650.000 personas, confirmó hoy un representante de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).

“Los refugiados citan el recrudecimiento de los enfrentamientos, pero también la creciente inseguridad alimentaria como las principales razones por las que han abandonado sus hogares”, dijo Adrian Edwards, portavoz del ACNUR, en conferencia de prensa en Ginebra.

Desde principios de año, unos 60.000 sursudaneses han huido del país, mayoritariamente a Sudán, Etiopía y Uganda. Desde diciembre de 2013, el total de refugiados ha ascendido a 555.000. Dentro del país, hay otro 1,5 millones de desplazados y más de 3,8 millones (un tercio de la población) no tienen suficiente comida.

Las oficinas del ACNUR en Sudán, Etiopía y Uganda han reportado que las llegadas de refugiados se han disparado desde mayo. Debido a la mayor inseguridad y la crítica situación humanitaria en el lado sursudanés de la frontera, el ACNUR y sus socios se están preparando para un alza en el influjo de refugiados.

Para poder continuar con la asistencia humanitaria, el ACNUR está construyendo un embarcadero en el río Nilo Blanco y está abriendo vías hacia los campamentos de refugiados. Las condiciones sanitarias y la disponibilidad de agua potable en estos refugios de emergencia necesitan mejorar rápidamente, advirtió el ACNUR.

Sin embargo, dado que se espera que el número de sursudaneses que huyen del país siga aumentando rápidamente, Edwards expresó su preocupación por la falta de fondos, ya que el plan de respuesta a la emergencia en el país sólo ha recaudado el 10 por ciento que necesita.

“Esto hace que actividades esenciales como la provisión de agua potable, saneamiento, atención médica, alimentos y refugio sufran por la escasez de recursos”, explicó el portavoz.