El ACNUR se prepara para combatir un posible brote de cólera entre refugiados burundeses en Tanzania

Muchos burundeses que han huido de la violencia a países vecinos ahora viven en la costa del lago Tanganica. Foto de archivo: ACNUR/F. Scoppa.
Muchos burundeses que han huido de la violencia a países vecinos ahora viven en la costa del lago Tanganica. Foto de archivo: ACNUR/F. Scoppa.

El ACNUR se prepara para combatir un posible brote de cólera entre refugiados burundeses en Tanzania

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) anunció hoy que está tomando medidas urgentes para contener la propagación de un grave brote de diarrea acuosa entre los refugiados burundeses recién llegados a Tanzania. Desde el miércoles ya han muerto siete personas.

“La prioridad del ACNUR es trabajar con el Ministerio de Salud y los socios internacionales para prepararse para lo peor y montar rápidamente un centro de tratamiento del cólera en Kagunga”, dijo en un comunicado de prensa Joyce Mends-Cole, representante del ACNUR en Tanzania.

El organismo de la ONU también está enviando aviones con medicamentos necesarios para complementar las existencias sobre el terreno.

Dos especímenes han sido preliminarmente diagnosticados como cólera, pero el laboratorio de referencia todavía no ha emitido una confirmación oficial.

Casi 400 burundeses en diferentes áreas de Tanzania están siendo tratados por la diarrea.

Kagunga es una pequeña aldea rodeada de una cordillera montañosa en el lado tanzano así que es más accesible por barco. Desde que empezaron a llegar olas de burundeses a principios de mayo, el ACNUR los ha trasladado en barco a Kigoma y de allí a un campamento de refugiados en Nyarugusu.

En este período, unos 20.000 refugiados han sido trasladados o han llegado a este campamento. Mientras tanto, el ACNUR está tomando medidas de prevención urgentes para mejorar el saneamiento y la higiene.

En Tanzania, el número de refugiados que han solicitado asilo se ha disparado en los últimos días por lo que las condiciones de vida se han vuelto muy precarias. Las autoridades inmigratorias locales informaron que más de 50.000 burundeses malviven en la costa del lago Tanganica.

Mends-Cole, la representante del ACNUR en Tanzania, aseguró que se están tomando todas las medidas posibles para controlar la situación pero que necesitan más fondos. Como ejemplo, mencionó el costo de los traslados en barco.

“Es una operación muy costosa. Tenemos dos barcos, uno que puede transportar a 600 personas por viaje y hace dos al día, y otro que lleva sólo a 300 en un viaje al día. Cada uno cuesta US$10.500 por viaje”, dijo.