ONU alerta de ataques a defensores de derechos humanos en Libia

Los grupos armados en Libia han atacado a defensores de los derechos humanos que se encuentran en el país para tratar de poner en evidencia los abusos cometidos, revela un nuevo informe de Naciones Unidas que detalla una letanía de ataques violentos y amenazas contra los activistas en Libia, incluso después de que algunos de estos se vieran obligados a salir del país.

El informe conjunto producido por la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos (OHCHR) y la Misión de Naciones Unidas para Libia (UNSMIL) documenta estos ataques, que incluyen ejecuciones, secuestros, tortura, detenciones ilegales y amenazas de muerte por teléfono y en las redes sociales, desde que se intensificaran los enfrentamientos en mayo de 2014.

Hace poco, la destacada activista Entissar al-Hassaeri fue asesinada de un disparo el mes pasado en Trípoli, según un comunicado. Su cuerpo y el de su tía fueron encontrados sin vida en el compartimento para equipajes de su auto el 23 de febrero.

Además, dos miembros de la Comisión Nacional para los Derechos Humanos en Libia, una organización no gubernamental, fueron secuestrados el 13 y 14 de febrero en el centro de Trípoli. Ambos han sido liberados, pero otros defensores de los derechos humanos y miembros de la sociedad civil siguen desaparecidos o han huido del país.

“Dado el incremento en el riesgo, el asesinato de destacados defensores de los derechos humanos y las repetidas amenazas, muchos han salido del país, se han callado o se han visto obligados a trabajar en secreto, con el grave riesgo que ello conlleva para su seguridad y la de sus seres queridos”, señala el informe.

Otra periodista y defensora de los derechos humanos recibió amenazas, incluso de violencia sexual, en su página de Facebook. “Iremos a tu casa y te deshonraremos”, decía uno de los mensajes. Tras huir de Libia en agosto de 2014, esta periodista siguió recibiendo amenazas por mensaje de texto.

“Los civiles en Libia, incluidos los defensores de derechos humanos, tienen pocas o ningunas vías para buscar protección o reparación por los daños sufridos”, alerta el informe. “El desmoronamiento de la ley y el orden ha provocado el fracaso del sistema de justicia penal en algunas partes de Libia, especialmente Derna, Bengasi y Sirte”, añade.

Las muertes de varias figuras destacadas en Bengasi el año pasado, incluyendo las del editor Muftah Abu Zeid, la defensora de los derechos humanos Salwa Bughaigis y dos jóvenes activistas de la sociedad civil, Tawfik Bensaud y Sami al-Kawafi, siguen sin resolverse.

El informe advierte que aquellos que cometen crímenes bajo el derecho internacional son penalmente responsables, así como ante la Corte Penal Internacional.

Entre otras medidas, el informe destaca la necesidad crucial de reinstaurar las instituciones estatales, especialmente las agencias de cumplimiento de la ley y todo el sistema judicial, así como condenar públicamente los ataques contra miembros de la sociedad civil.

Los países vecinos y la comunidad internacional también deberían garantizar la protección de los defensores de los derechos humanos en Libia, incluso mediante la emisión de visados de emergencia y la provisión de refugio temporal, urge el informe.