OIT: invertir en empleo de calidad promueve el avance económico

Trabajadoras en la industria de la confección  Foto: OIT/M. Crozet
Trabajadoras en la industria de la confección Foto: OIT/M. Crozet

OIT: invertir en empleo de calidad promueve el avance económico

La inversión en puestos de trabajo de calidad promueve un crecimiento económico robusto a nivel nacional, subrayó hoy la Organización Internacional del Trabajo (OIT) al difundir un informe sobre este asunto.

Eso implica reducir el número de personas que desarrollan empleos informales por cuenta propia o en negocios familiares sin percibir un salario. También, otorgar seguridad social, capacitación y reducir la cantidad de trabajadores en condiciones de pobreza, que ganan menos de 2 dólares al día.

Un informe de ese organismo sobre el desarrollo a través del empleo, revela que las naciones que más invirtieron en ese tipo de ocupaciones a partir del 2000 registraron desde el 2007 un crecimiento de un punto porcentual al año por encima de otras economías emergentes y en desarrollo.

“Una de las lecciones más importantes es que el desarrollo no ocurre solamente como resultado de factores como las exportaciones, el libre comercio y las inversiones extranjeras directas (…)”, manifestó Guy Rider, director general de la OIT, al presentar el estudio en Ginebra.

“La protección social, el respeto de las normas fundamentales del trabajo y las políticas que promueven el empleo formal también son decisivos para crear empleos de calidad, que incrementan el consumo interno e impulsan el crecimiento global”, agregó Ryder.

El estudio, que analizó la situación de 145 países emergentes y en desarrollo, menciona a Uruguay como ejemplo de formalización del empleo con la creación del “monotributo” para los trabajadores autónomos, lo cual incluye la simplificación de los procedimientos administrativos y favorece la iniciativa empresarial formal.

También señala que muchos países en América Latina y Asia están haciendo esfuerzos para mejorar la calidad del empleo y la seguridad social, mientras que Europa parece ir en la dirección opuesta.