Ban inaugura eventos de conmemoración de los 20 años del genocidio en Rwanda

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Ban inaugura eventos de conmemoración de los 20 años del genocidio en Rwanda

El Secretario General de la ONU inauguró hoy “Kwibuka 20” una serie de eventos para conmemorar los 20 años transcurridos desde el genocidio de Rwanda.

Bajo el lema “Recordar, unir, renovar”, la iniciativa invita a reflexionar durante las próximas semanas sobre la matanza brutal de 800.000 personas inocentes y sobre las lecciones de unidad y determinación de renovación que el pueblo rwandés ha dado desde entonces.

En sus palabras para la ocasión, Ban Ki-moon expresó su admiración por la valentía de la gente de Rwanda para renovar su país y sentar las bases de un futuro seguro y próspero.

“Nos inspira la capacidad del pueblo rwandés de unirse y mostrar que la reconciliación es posible aún después de una tragedia de proporciones tan monumentales”, dijo.

Ban recordó que el genocidio de Rwanda fue un fracaso mayúsculo de la comunidad internacional de tomar medidas frente a crímenes atroces.

Agregó que a partir de esa catástrofe ha quedado claro que el genocidio no es un evento aislado sino un proceso que se desarrolla en el tiempo y requiere planeación y recursos para llevarse a cabo.

“Esto suena escalofriante, pero quiere decir que con información adecuada y movilización, valor y voluntad política, el genocidio se puede evitar”, aseveró.

El titular de la ONU indicó que los Estados han entendido esa conclusión y han mejorado las respuestas ante ese tipo de amenazas.

Se refirió al principio de la responsabilidad de proteger adoptado por los Estados miembros de Naciones Unidas.

Asimismo, destacó las capacidades de mediación y diplomacia preventiva de la ONU y al trabajo de la Corte Penal Internacional y de los tribunales especiales, como el establecido para juzgar a los responsables del genocidio en Rwanda.

No obstante, Ban también reconoció que todavía hay mucho que hacer para evitar atrocidades como las que están ocurriendo en Siria o la República Centroafricana, o asedios como los que padecen en Europa migrantes, musulmanes, gitanos y otras minorías.

En este sentido, llamó a defender a las comunidades en riesgo de atrocidades masivas.

El presidente de la Asamblea General, John Ashe, también participó en el evento y recordó que desde 2004 ese órgano de la ONU ha adoptado resoluciones anuales en favor de los supervivientes y en particular de los más vulnerables.

“Ayudar a los sobrevivientes a reconstruir sus vidas deshechas y reparar el tejido social de la sociedad rwuandesa ha sido una tarea de proporciones monumentales. Veinte años después de la tragedia, persisten muchos desafíos y el país sigue necesitando un fuerte apoyo de la comunidad internacional para asistir a las víctimas en áreas como la vivienda, la salud, el bienestar y la educación”, aseguró Ashe en otro momento de su discruso.

Agregó que “podemos mirar los logros del pueblo rwandés en los últimos veinte años con respeto y admiración. Su compromiso para reconstruir el país y restaurar el bienestar de la gente refleja un espíritu indomable”.