Sesión especial del Consejo de Derechos Humanos sobre Siria

El documento, elaborado por una comisión independiente de investigación de la violencia en el país árabe, sostiene que más de 4.000 personas han muerto por la represión de las fuerzas gubernamentales, incluyendo 307 niños.
La Alta Comisionada para los Derechos Humanos, Navi Pillay, pidió a la comunidad internacional tomar medidas urgentes para proteger a la población siria.
“Las autoridades sirias continúan su opresión despiadada que, si no se detiene ahora, podría conducir a una guerra civil en toda regla. Ante el fracaso manifiesto de las autoridades en la protección de sus ciudadanos, la comunidad internacional debe tomar medidas urgentes y eficaces para proteger a la población siria”, dijo Pillay.
Entre tanto, el embajador sirio ante la ONU en Ginebra, dijo que la comunidad internacional está tratando de “poner más leña al fuego” de los disturbios de Siria y que debe dejar al país resolver sus problemas por sí mismo.
Fuente: Radio de las Naciones Unidas