Obama insta a realizar referendos a tiempo y pacíficamente
Al participar en la reunión de alto nivel sobre Sudán realizada en el marco de la 65ª sesión de la Asamblea General de la ONU, Obama recordó que el alto precio de las dos décadas de guerra civil entre el norte y el sur del país: dos millones de muertos, además de millones de desamparados y desplazados.
Este terrible legado, que aún amenaza la estabilidad de toda la región, no debe convertirse en el futuro de los sudaneses, dijo el mandatario.
Insistió en que el Acuerdo Amplio de Paz de 2005, que dispone la organización de los referendos, debe cumplirse en su totalidad y agregó que las partes deben respetar los resultados.
Obama exhortó a la comunidad internacional a apoyar el proceso de los referendos y ofreció el respaldo de su país; sin embargo, afirmó que la responsabilidad principal recae en el gobierno sudanés.
“Nadie puede imponer el progreso y la paz a otra nación. En última instancia, sólo los líderes sudaneses pueden garantizar que los referenda tengan lugar y permitan que Sudán encuentre la paz”, dijo.
El presidente estadounidense advirtió que hay dos caminos por delante: presión y aislamiento para los que no cumplan sus responsabilidades, y mejores relaciones entre Estados Unidos y Sudán para los que cumplan los acuerdos.
En los referendos del 9 de enero de 2011, los sudaneses del sur decidirán si se separan del país o si permanecen como parte del mismo.
Por su parte, los habitantes de Abyei –el área petrolera del centro de Sudán –, votarán para resolver si esta zona seguirá bajo la administración del norte del país o si se acogerá al gobierno del sur.
La guerra civil entre el norte y el sur de Sudán terminó con el Acuerdo Amplio de Paz de 2005 luego de dos décadas que causaron la muerte de dos millones de personas.