FAO llama al mundo a manifestarse contra el hambre

FAO llama al mundo a manifestarse contra el hambre

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La FAO lanzó hoy una campaña a gran escala por internet en la que llama a la población de todo el mundo a manifestarse contra el hambre, un flagelo que afecta a mil millones de personas.

El proyecto Mil millones de hambrientos utiliza imágenes de impacto para mostrar la cara más amarga del hambre en redes sociales como Facebook, Twitter y YouTube.

Uno de los elementos de esta campaña es un video promocional realizado por el actor británico Jeremy Irons en el que interpreta el papel de un presentador de noticieros de televisión irritado por la situación del mundo que afirma estar “loco de rabia”.

Además del actor, participan en la iniciativa del organismo de la ONU el atleta olímpico estadounidense Carl Lewis, el futbolista francés Patrick Vieira y el músico cubano Chucho Valdés, entre otras personalidades del deporte y el arte internacional.

La tipografía y el lenguaje atrevido de la campaña tienen el propósito de captar la atención de la gente para recalcar que la situación ha llegado al límite.

La FAO utiliza un silbato amarillo como icono y anima a la gente a hacerlo sonar para que los gobiernos hagan de la erradicación del hambre su prioridad.

“Tenemos que exigir a los líderes nacionales, a quienes toman las decisiones y a la comunidad internacional que pasen ya a la acción”, dijo Jacques Diouf, director general de la FAO.

Al lanzar la campaña, la FAO recordó que si la disminución del hambre en el mundo continúa al ritmo actual, no se cumplirá el Objetivo de Desarrollo del Milenio de reducir a la mitad el porcentaje de personas hambrientas para el año 2015.

De los cerca de mil millones de personas que sufren hambre, 642 millones viven en Asia y el Pacífico, 265 millones en África subsahariana, 53 millones en América Latina y el Caribe, 42 millones en Medio Oriente y el Norte de África y 15 millones en países desarrollados.

La FAO estima que la producción agrícola mundial necesita crecer un 70% para poder alimentar a los 9.000 millones de personas que habitarán el planeta en 2050.