Somalia: UNESCO condena asesinato de periodista
El director general del organismo, Koïchiro Matsuura, recordó que para ejercer su derecho a la libertad de expresión y cumplir con la tarea de informar a los somalíes y al resto del mundo sobre los acontecimientos en Somalia, los periodistas precisan de un entorno que proteja su integridad.
Afirmó que los comunicadores asumen grandes riesgos al desempeñar una labor que es esencial para la reconciliación nacional y la reconstrucción del país.
Hared murió el pasado 28 de enero cuando una mina operada a control remoto estalló al paso de un vehículo de la organización Médicos sin Fronteras en el puerto de Kismayo.
Según el Comité para la Protección de los Periodistas, el año pasado siete informadores murieron en Somalia mientras cumplían con su trabajo, cifra que convirtió al país en el segundo más peligroso para estos profesionales, sólo detrás de Iraq.