Annan inaugura Consejo de Derechos Humanos con llamado a iniciar “nueva era”

Annan inaugura Consejo de Derechos Humanos con llamado a iniciar “nueva era”

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El Consejo de Derechos Humanos se inauguró hoy con un llamamiento del Secretario General de la ONU, Kofi Annan, a dejar atrás el pasado y comenzar una nueva era en materia de protección a las garantías fundamentales del individuo en todo el mundo.

“Por sobre todas las cosas, debe ser evidente un cambio en la cultura”, dijo Annan a los representantes de más de cien países durante su discurso de apertura del nuevo órgano en Ginebra.

En su discurso, el titular de la ONU pidió a los Estados Miembros poner fin a la confrontación y desconfianza que afectaba a la desaparecida Comisión de Derechos Humanos.

“Nunca permitamos que este Consejo se convierta en rehén político ni elemento de maniobras mezquinas”, recalcó.

Exhortó a pensar siempre en las personas a quienes les son negados sus derechos, y en quienes sufren los tratos crueles de los regímenes autoritarios, así como en quienes padecen el flagelo de la ignorancia, el hambre o la enfermedad.

Annan subrayó que a menudo son las personas que buscan mejorar el bienestar de sus comunidades las que se convierten en víctimas de la opresión y recordó que esta falta de libertad y de salvaguardas legales inhibe el desarrollo económico y social.

La creación del Consejo de Derechos Humanos forma parte de la reforma al sistema de las Naciones Unidas, propuesta originalmente por el Secretario General de la Organización, y enriquecida y aprobada por la Asamblea General de la ONU.

“Este Consejo representa una gran oportunidad para las Naciones Unidas y para la humanidad de renovar la lucha por los derechos humanos. Les ruego que no la desperdicien”, puntualizó Annan.

La sesión inaugural del nuevo órgano –que durará hasta el 30 de junio– está presidida por México y cuenta con la presencia de representantes de alto nivel de más de cien países.

Durante este periodo, los delegados comenzarán los trabajos que permitirán hacer del Consejo un órgano más sólido y efectivo en sus funciones que la Comisión que lo antecedió.

El nuevo Consejo, con un estatus de filial de la Asamblea General, celebrará reuniones todo el año, tendrá representación geográfica equitativa y examinará constantemente la situación de los derechos humanos en los países que lo conforman.

El Consejo está formado por 47 miembros –no reelegibles después de dos periodos consecutivos– electos por mayoría en votación directa e individual, que pueden ser retirados del cargo si durante su gestión cometen violaciones a los derechos humanos.