FAO destaca importancia de diversificar fuentes de ingreso para combatir pobreza rural

FAO destaca importancia de diversificar fuentes de ingreso para combatir pobreza rural

A pesar de los importantes avances hacia la diversificación de las fuentes de ingresos en las familias campesinas, la agricultura continúa siendo la principal actividad de la población rural en los países en desarrollo, según un estudio dado a conocer hoy por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

Estos datos sobre la estructura de los ingresos rurales, junto a otros diversos aspectos de la economía rural, son discutidos en un seminario promovido por el organismo de la ONU, inaugurado hoy con el propósito de buscar formas creativas de ayudar a las familias rurales a escapar del hambre y la pobreza.

En el evento participan destacados especialistas a nivel mundial en el campo de la economía agraria que debaten cuestiones como la migración, las inversiones públicas en zonas rurales, las cadenas de comercialización y su relación con las economías rurales. Al foro asisten también representantes de bancos multilaterales de desarrollo, que discutirán las estrategias de sus organismos para el medio rural.

“Al organizar el taller, la FAO busca sensibilizar a la opinión pública sobre la forma en que los recientes cambios y tendencias -como la globalización-, configuran el contexto en el que operan las economías rurales y cuales son las implicaciones para las políticas de reducción de la pobreza rural”, explicó Kostas Stamoulis, de la Dirección de Economía Agrícola y del Desarrollo de la FAO.

El estudio base del encuentro, que abarca tres regiones geográficas en el mundo en desarrollo, indica que el 84% de las familias en el medio rural se dedican a actividades agrícolas, y que este porcentaje alcanza el 99% en algunos países.

Sin embargo, muestra también que las familias campesinas obtienen una parte importante de sus ingresos de actividades rurales no agrícolas, y que estas son a menudo más lucrativas.

La proporción de dinero obtenida por este tipo de actividades varía entre las diferentes regiones y países. En países más desarrollados, como Panamá, el porcentaje de ingresos derivado de actividades rurales no agrícolas es del 75%, mientras que en países de menor renta, como Nicaragua, el porcentaje es del 28,5%.

El estudio es el resultado preliminar de un proyecto conjunto de la FAO, el Banco Mundial y la American Univerity en Washington DC., cuyo objetivo es crear una base de datos completa sobre las fuentes de ingresos rurales basada en las encuestas a muestra representativa de familias a nivel nacional. La intención última es utilizar los análisis individuales de cada país y los datos cruzados entre países para avanzar en la lucha contra la pobreza y el hambre en estas zonas.