FAO advierte que brecha digital dificulta desarrollo en las zonas rurales
El organismo de la ONU explicará sus iniciativas para mejorar el intercambio de conocimientos y el acceso a la información dentro de la lucha contra el hambre y la pobreza en la segunda fase de la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información, que se inicia mañana en Túnez.
“La brecha digital rural es la disparidad de acceso a las tecnologías de la información y la comunicación que existe entre la población rural y urbana, privando al mundo rural de información vital”, señaló Antón Mangstl, director de la Biblioteca y Sistemas de Documentación de la FAO.
Esta brecha obstaculiza el desarrollo de las áreas rurales, donde la información y la comunicación son cruciales para mejorar las técnicas agrícolas y el acceso a los mercados, añadió.
El origen de la brecha digital se encuentra en una compleja serie de cuestiones, que incluyen la ausencia de infraestructura de telecomunicaciones y equipos necesarios para la conectividad, de los conocimientos técnicos y capacidad institucional, la falta de representación eficaz y de participación en el proceso de desarrollo y la escasez de recursos económicos.
La FAO lanzó en diciembre de 2003 un programa para Cerrar la Brecha Digital en el Medio Rural como respuesta a la necesidad de dedicar los recursos y conocimientos suficientes de todo el mundo para lograr un enfoque más coherente y sistemático del problema.
Este programa está relacionado con el primero de los Objetivos de Desarrollo del Milenio de la ONU, la erradicación del hambre y la pobreza extremas. También enlaza con el Plan de Acción de la primera Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información, que llamó a las partes implicadas a conseguir una serie de objetivos para 2015.
Entre estos objetivos se incluye la creación de una Sociedad de la Información abierta e inclusiva, poner el potencial del conocimiento y de las tecnologías de la información y la comunicación al servicio del desarrollo, promover el uso de la información y los conocimientos para alcanzar los objetivos de desarrollo acordados en el marco internacional y hacer frente a los nuevos retos de la Sociedad de la Información, a nivel nacional, regional e internacional.
La FAO ya ha ayudado a un cierto número de países a conseguir que la población rural esté mejor preparada en el uso de la tecnología con el fin de intercambiar información y comunicarse de forma más efectiva.
En varias partes del mundo ya se están dando pasos tangibles hacia la reducción del hambre y la pobreza a través de la aplicación de las tecnologías de la información y la comunicación: los programas de las radios rurales en África, dirigidos a una audiencia de campesinos -donde se incluyen muchas mujeres- han conseguido elevar el nivel de su información sobre alimentación y agricultura gracias a los talleres de formación organizados por la FAO.
En Asia, la Organización ha ayudado a los institutos de crédito rurales a usar los programas informáticos de bajo coste sobre microcréditos, lo que les permite hacer préstamos a los pequeños campesinos. En América Latina, el gobierno de El Salvador ha desarrollado un sistema de alerta temprana por Internet para hacer frente a los desastres naturales, que recopila datos de una amplia gama de fuentes locales y nacionales.