UNAMA deplora escalada de violencia en Afganistán
La Misión de Asistencia de las Naciones Unidas para Afganistán (UNAMA) deploró la escalada de violencia en ese país y solicitó la cooperación de las autoridades, de las fuerzas internacionales y del gobierno de Pakistán para detener estas acciones y lograr una estabilidad duradera en el territorio afgano.
Los incidentes más recientes incluyen el asesinato del clérigo Maulawi Abdullah Fayaz, la masacre en la mezquita Abdul Rab Akhundzada, el homicidio de cinco trabajadores del programa de desactivación de minas, la decapitación del mulá Ida Khan y la ejecución de al menos cuatro policías en la provincia de Kandahar, entre otros.
Además, se han registrado varios ataques contra personas involucradas en la organización de las próximas elecciones.
Hasta ahora, el sur del país ha sido el más afectado; sin embargo, la inseguridad impera en todos los rincones de Afganistán.
Jean Arnault, representante especial para el país y titular de la UNAMA, condenó enérgicamente esta oleada de violencia y afirmó que los responsables privan a la población de su derecho a la reconstrucción al crear un clima de miedo cuando el país se prepara para las elecciones parlamentarias y provinciales.
El diplomático destacó que no toda la violencia es causada por ataques de extremistas, sino que también son responsables el narcotráfico, las rivalidades locales, la corrupción y el crimen común.
No obstante, advirtió que la ofensiva de los grupos extremistas, entre ellos el Talibán, propicia el aumento de la violencia. Agregó que estos ataques parecen contar con más fondos, más armas, medios más poderosos de propaganda y tácticas más agresivas y crueles.
Por último, Arnault consideró que es posible lograr un entorno de seguridad si se mejora la cooperación y encomió las recientes conversaciones con este propósito de los gobiernos afgano y pakistaní.