Llega último cargamento de PMA a China, que se convierte en país donante
China recibió el último cargamento de asistencia del Programa Mundial de Alimentos (PMA), que auxilió a más de 30 millones de habitantes durante 25 años de labor en ese país, que pasó de beneficiario a donante del organismo de la ONU.
La llegada de este envío de víveres marca un hito en la campaña del Programa por combatir el hambre a nivel mundial, recalcó el PMA.
“Este cargamento final es, sobre todo, un tributo al éxito de China al aliviar el hambre a nivel nacional. China es ahora uno de los líderes mundiales de la lucha contra el hambre”, recalcó James Morris, director ejecutivo del PMA.
Agregó que en la última década el Programa ha eliminado progresivamente la asistencia a más de 25 países, pero subrayó que el caso de China es el más significativo porque pasó de un lado al otro del espectro.
“Necesitamos la ayuda y los recursos chinos para aplicar las lecciones aprendidas en ese país en otras regiones que sufren hambre en el mundo”, dijo Morris.
La última carga –que llegó al puerto de Chiwan, en la provincia de Guangdong- contiene 43.000 toneladas de trigo de Canadá, valoradas en 7,2 millones de dólares, y se destinará a proyectos para aliviar la pobreza en cuatro provincias chinas.
El PMA empezó su labor en China en 1979 y concentró sus tareas en las regiones más remotas del centro y occidente del país.
Además de distribuir comida para satisfacer las necesidades inmediatas de la población, el PMA promovió y apoyó la creación de programas para producir alimentos mediante esquemas de trabajo comunitario.
Al anunciar el fin de la asistencia alimentaria a China, el gobierno de este país y el organismo de la ONU acordaron una relación de cooperación para combatir el hambre a nivel mundial. China donó recientemente un millón de dólares al PMA para respaldar los trabajos humanitarios con la población afectada por el tsunami en el Océano Índico.