UNICEF reporta daños en infraestrucura escolar en Iraq

UNICEF reporta daños en infraestrucura escolar en Iraq

Unos 4,3 millones de niños iraquíes están matriculados en primaria, pero no hay suficientes pupitres, sillas o clases para ellos y muchos de los colegios están destruidos o carecen de los servicios mínimos como agua o luz, según revela un estudio realizado por el Ministerio de Educación iraquí con apoyo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF).

En algunas zonas como Thiqar, Salaheldin o Diala, un 70% de los colegios no tiene agua. De las 14.000 escuelas que había antes de la guerra, unas 2.700 fueron destruidas, y otras 3.000 necesitan una profunda rehabilitación.

Algunos colegios funcionan al doble de su capacidad, y una cuarta parte de los mismos hace hasta tres turnos cada día, con lo que la jornada escolar se ve reducida notablemente.

“Iraq tenía uno de los mejores sistemas educativos de Oriente Medio”, explicó el representante de UNICEF en Iraq, Roger Wright, en la presentación de estos datos en Ginebra.

“[Gracias a este estudio]Ya sabemos lo mucho que se ha deteriorado la educación, hoy millones de niños van a la escuela pero no tienen agua ni servicios sanitarios, las paredes se caen a pedazos, las ventanas están rotas y los tejados tienen goteras”, dijo.

Wright achacó esta situación a más de diez años de negligencia, falta de fondos durante la etapa de sanciones, así como tres guerras, empezando por la de Irán-Iraq. En marzo de 2003 más de 700 colegios fueron dañados por los bombardeos, un tercio de ellos en Bagdad, otros 200 fueron quemados y más de 3.000 asaltados y víctimas del pillaje.

De los 4,3 millones de niños escolarizados, 2,4 son niños y 1,9 niñas, una proporción similar a la de antes de la caída de Sadam Hussein. En algunas zonas las niñas no llegan al 39%, pero en Bagdad es del 46%, la proporción más alta del país.

Los trabajos de reconstrucción y rehabilitación que llevan a cabo desde marzo de 2003 compañías privadas, agencias de la ONU y organizaciones no gubernamentales se han visto ralentizados a causa del empeoramiento de la seguridad en el país.