La ONU pide la apertura del puerto de Gonaïves ante el fin de las reservas de comida
La Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA) ha pedido urgentemente a las fuerzas de paz de la ONU y al gobierno haitiano que hagan un esfuerzo para reparar y abrir el puerto de Gonaïves ante el inminente fin de las existencias de comida.
De esta manera se facilitaría la distribución de alimentos, especialmente arroz, en la ciudad más devastada por la tormenta tropical Jeanne, que azotó el norte del país el mes pasado. Hasta el momento, las agencias humanitarias han distribuido ayuda a unas 54.000 familias pero no han tenido acceso a más personas debido a las dificultades que plantea el cierre del puerto, principal vía de abastecimiento.
En cambio la distribución de agua está funcionando mejor gracias a los esfuerzos del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) que ha reparado puntos de abastecimiento en varios colegios de la ciudad.
Los residentes de Gonaïves aún se enfrentan a situaciones muy duras, muchas de las calles y viviendas permanecen enterradas bajo el barro y los escombros, y los refugios carecen de higiene o servicios sanitarios.
La destrucción de Jeanne ha dejado a Haití mucho más vulnerable a las tormentas que a cualquiera de sus vecinos del Caribe; además el ecosistema marino también ha sido seriamente dañado por lo que quienes viven de la pesca podrían también quedarse sin recursos.
Unas 1.500 personas murieron, la mayoría en Gonaïves, y 900 permanecen desaparecidas a causa de las inundaciones y los deslizamientos de tierra producidos por el huracán.