FAO advierte que gripe aviar supone crisis de importancia mundial

FAO advierte que gripe aviar supone crisis de importancia mundial

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La epidemia de gripe aviar presente en Asia es una crisis de importancia mundial y seguirá exigiendo la atención de la comunidad internacional durante algún tiempo, declararon hoy conjuntamente la Organización de las Naciones Unidas para las Agricultura y la Alimentación (FAO) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).

Los recientes brotes de gripe aviar en China, Vietnam, Camboya, Malasia y Tailandia revelan que el virus causante de la enfermedad sigue circulando en la región y probablemente no se erradicará en el futuro inmediato, dijeron ambas organizaciones.

Agregaron que urge seguir investigando el papel de los animales silvestres, los patos domésticos y los cerdos en la transmisión del virus entre los animales, ya que todavía no se conoce lo suficientemente, por lo que continúa siendo una amenaza constante para la salud animal y humana.

Del mismo modo, la FAO y la OIE destacaron la necesidad de una inversión fuerte para fortalecer los servicios veterinarios, en particular los de vigilancia, alerta, detección, información e intervención, así como para el restablecimiento y la reestructuración del sector avícola.

Con respecto a la polémica en torno a la vacuna contra la gripe aviar, reiteraron que la mejor forma de combatir y eliminar esta enfermedad consiste en sacrificar a los animales infectados.

Sin embargo, la FAO y la OIE reconocieron que esta política podría no ser práctica ni adecuada en algunos países por motivos sociales y económicos, o debido al gran riesgo de transmisión del virus por la presencia de la infección en las aldeas, las aves silvestres o las aves acuáticas domésticas. En estos casos, los países que decidan combatir la enfermedad pueden optar por aplicar la vacuna como medida complementaria a la política de eliminación de los especímenes infectados.

Aclararon que la aplicación de la vacuna no sólo protege de la enfermedad a las aves sanas, sino que también reduce el volumen del virus excretado por las aves infectadas y, de esta manera, la probabilidad de transmisión del mismo a otras aves y a las personas.

Con todo, la decisión de utilizar la vacuna corresponde a cada país, a partir de su situación particular, dijeron la FAO y la OIE.